José M. Castillo
S.
www.religiondigital.com / 130617
Hay gentes
piadosas que amenazan con una "respuesta adecuada" a la presunta
provocación de los moros, que en Granada son más de 7.000. Hablo de la
religión, tal como la deberíamos entender y practicar los cristianos. Respeto,
por tanto, la religión tal como la puedan entender y practicar en otras
tradiciones religiosas.
Los cristianos, si
es que somos cristianos de verdad, debemos tener siempre muy presente que Jesús
repitió, hasta seis veces, que los cristianos cuidemos de no hacer nuestras
obras de piedad delante de la gente para llamar la atención. Si otros lo hacen
así, se les respeta. Porque seguramente están persuadidos de que deben proceder
de esa manera.
El Evangelio ve
este asunto de otra forma. En concreto, por lo que se refiere a la oración,
Jesús es tajante: "Tú, cuando vayas a rezar, entra en tu cuarto y cierra
la puerta, para orar a tu Padre que está allí, en lo secreto. Y tu Padre, que
ve lo secreto, te recompensará" (Mt 6, 6).
Lo que Jesús
quiere decir, cuando manda rezar "en lo secreto" ("en
kryptó"), es dejar muy claro que la oración puede convertirse en un
recurso para la propia ostentación. Nuestra vanidad y nuestro orgullo se
disfrazan, con frecuencia, de piedad, devoción y religiosidad. Por eso, Jesús
se iba, para orar, a lugares solitarios (Mc 1, 35; Lc 5, 6) o rezaba a solas
(Mt 14, 23; Lc 9, 18; cf. Mc 14, 32-42).
Lo
importante en la vida no es "aparecer" como buena persona, sino
"ser" buena persona. Esto es lo primero, que todas las
personas religiosas tendríamos que cuidar con esmero.
Y si los creyentes
de otras religiones rezan en público, ¿nos vamos a escandalizar o indignar los
católicos, que con tanta frecuencia paseamos a nuestros santos y nuestras
imágenes por las calles y plazas de nuestras ciudades, con devoción,
ostentación, arte y lujo, de forma que hasta los turistas lo disfrutan y las
agencias de viajes hacen su negocio? Nunca tendremos todos, absolutamente
todos, el suficiente respeto, que nos debemos tener unos a otros.
Y no olvidemos
nunca que "la esencia del fanatismo reside en el deseo de obligar a los
demás a cambiar" (Samuel Oz).
Reacción del
alcalde de Granada
Ante el revuelo
organizado a causa del acto del Ramadán frente a la Virgen del Triunfo, el
alcalde de Granada, Francisco Cuenca (PSOE), ha señalado que el evento del
pasado sábado a los pies de la Virgen del Triunfo para dar a conocer el Ramadán
y celebrar la ruptura del ayuno fue una jornada de "convivencia" en
la que participó "gente de todos los credos" y ha defendido la
importancia de que en esta ciudad "prevalezca" la
"tolerancia" y el "respeto" a otras culturas frente a
"las polémicas partidistas".
Cuenca se ha pronunciado
de este modo a preguntas de los periodistas tras la polémica suscitada entre
algunos partidos y en las redes sociales por el lugar escogido para este
evento, que se llevó a cabo junto a la Virgen del Triunfo e incluyó los
tradicionales rezos musulmanes y el intercambio de comida tradicional. De
hecho, el PP ha acusado este lunes al alcalde de "agraviar e insultar a
miles de granadinos" por "amparar" la celebración de este rezo
colectivo de musulmanes en un lugar "con un significado muy especial para
los católicos".
El regidor ha
explicado que la organización solicitó un espacio para llevar a cabo el evento,
que ante todo fue "una invitación para conocer una cultura" y
"generar espacios de convivencia" y en la que participaron personas
que fueron a celebrar el fin del Ramadán, pero también "monjas" y
gente que quería conocer estas tradiciones.
Ha descartado que
los colectivos organizadores dieron ningún tipo de aportación económica al
Ayuntamiento y ha rehusado entrar a valorar el lugar escogido, partidario de
que "independientemente del sitio, lo más importante es que prevalezca esa
mezcla de culturas, de conocimiento y de tolerancia" por la que
"siempre" se ha caracterizado Granada.
Así, ha opinado
que "no caben faltas de respeto" en este asunto y ha lamentado que
determinados partidos, entre ellos el PP, "aproveche este acto para
generar este tipo de polémicas", cuando Granada es una "ciudad
tolerante, de convivencia y respetuosa con todos los credos".