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13 diciembre 2019 El exvicepresidente estadounidense y
Premio Nobel de la Paz, Al Gore, en la COP25, en Madrid. REUTERS / Sergio Perez.
Dicen que el que mata a una persona es un
asesino, el que mata miles en la guerra es un héroe, y si encima se viste de verde
es Superman. En la Cumbre del
imperialismo verde de Madrid 2019 no podía faltar Albert «Al» Gore,
el promotor del negocio Big Green, el vicepresidente del gobierno de Bill
Clinton (1993-2001) y premio Nobel de la Paz por su defensa al medio ambiente,
el mismo galardón que recibió Henry Kissinger por su pacifismo y sus esfuerzos
por los derechos humanos de los oprimidos.
Debido a que “borrar la memoria histórica” de
los ciudadanos es imprescindible para que el actual sistema siga funcionando
con tranquilidad, es también imprescindible desempolvar los dos aspectos del
perverso historial del Héroe Verde para quienes pretendemos cambiarlo: 1) Como
el hombre de destrucción masiva bélica de Afganistán, Iraq, Yugoslavia,
Albania, Sudán, Liberia, Haití y Congo, y 2) El falso ambientalista, fabricado
por el imperialismo verde, que con su fama protege la destrucción del medioambiente
a favor de sus propios negocios y de su clase. Se trata de uno de los halcones
más agresivos del Partido Demócrata, personaje especialmente oportunista, que
durante su carrera ha intentado con sus discursos contradictorios ganar el voto
de los ultraconservadores y también los progresistas, y después utilizarlo para
los intereses más siniestros de EEUU en el mundo.
El
currículum bélico de Al Gore
Férreo partidario de guerras de rapiña y de
expansión colonialista de EEUU, Al Gore atacó a quienes recurrían al “Síndrome
de Vietnam”, y la muerte de miles de soldados para evitar más guerras: “Tenemos
intereses en el mundo que son lo suficientemente importantes como para
defenderlos. Y no deberíamos estar tan quemados por la tragedia de Vietnam que
no reconocer la necesidad del uso de fuerza para nuestros intereses «¿Ha hecho
algún estudio para determinar el daño de las guerras (¡el uso de agente
naranja”, por ejemplo!) al medio ambiente?
+En 1978, nuestro Nobel se opuso a nuevas
regulaciones federales de armas de fuego, para contentar a sus votantes en las
zonas rurales.
+En 1979 defendió el patrocinio del grupo
terrorista Contra en Nicaragua por Reagan, y financiado con cocaína (a los “yihadistas”
en Afganistán la CIA les paga con
el dinero del opio, cuyo cartel obliga los agricultores cultivar la
adormidera en vez de patatas y trigo).
+En 1983, respaldó el envío de tropas por al
Líbano, donde un atentado mató a 241 soldados de EEUU, a 58 paracaidistas
franceses, y 6 civiles libaneses. ¿Qué se le ha
perdido a EEUU en el Líbano?
+En 1983, aplaudió la invasión de EEUU a la
diminuta isla de Granada de 90.000 habitantes por representar una “amenaza para
EEUU” de 300 millones de almas y dotado de 5.113 ojivas nucleares. ¿El motivo
real? Ser gobernada por los socialistas, y aliado de Cuba y la URSS.
+En 1986 celebró el bombardeo de Libia por
Reagan.
+En 1991 el halcón Gore votó en favor de la
decisión de Bush de atacar a Iraq, guerra que causó gran desastre
ecológico del Golfo Pérsico. ¡Luego le criticó a Bush por haber sido
“demasiado blando” con Saddam Husein!
+En 1991, el mismo Gore que estaba muy
preocupado porque los niños de EEUU “pudieran padecer tumores y cáncer producidos
por productos químicos usado en los pijamas para dormir”, aprobó el embargo más
criminal de la historia de la humanidad contra el pueblo iraquí, que mató a millón
y medio de personas, casi la mitad niños. El 29 de junio de 2000,
cuando Gore daba una conferencia en Chicago sobre ‘incentivos de la política
energética para las ciudades’, el director de Voces en el Desierto, Danny
Muller, le preguntó «¿por qué debería alguien votar a una administración que
mata a 5.000 niños inocentes al mes, mediante sanciones en Iraq?” Gore no
contestó, y sus matones le sacaron de la sala. El embargo prohibía la venta de
productos como cloro para potabilizar el agua, material sanitario como
jeringuillas y multitud de medicamentos, aparatos de oxígeno para los
hospitales, papel y lápices o leche en polvo, en el marco de una guerra
genocida a toda regla. Miles de niños nacieron con deformaciones
espantosas, víctimas de toneladas de bombas, incluidas con uranio
empobrecido. La pintora y directora del Museo Nacional de Arte de Iraq Leila
al-Attar y su esposo murieron en uno de estos bombardeos.
+En 1993, tras la caída del régimen de Siad
Barre en Somalia, -que pasó de ser maoísta a un aliado de Washington en el
estratégico Cuerno de África-, Al Gore-Clinton organizaron una de sus “invasiones
humanitarias”. Mientras la matanza de miles de somalíes fue considerada “daño
colateral” de sus infames intereses, la “batalla de Mogadiscio”, en la que la
guerrilla somalí se enfrentó a las tropas de EEUU matando al menos a 70
marines, se convirtió en la segunda derrota de EEUU en una guerra después de
Vietnam.
+En 1994 autorizó a la CIA el secuestro de
ciudadanos de otras naciones que él consideraba una amenaza para los intereses
de EEUU, revela Richard Clarke, un asesor de seguridad de Estado crítico con la
política antiterrorista de EEUU.
+En 1994, la ONU y el gobierno de Clinton-Al
Gore-Albright sabía que el responsable de la masacre de los musulmanes en un
mercado de Sarajevo fue un grupo musulmán de extrema derecha, y aun así
culparon al gobierno de la Federación Yugoslava, -al que los medios occidentales
llamaban “gobierno serbio” para enfrentar a los grupos étnicos que componían el
país-, y así desmantelar el último estado europeo que se declaraba socialista aún,
tras el fin de la URSS.
+El apoyo encubierto del régimen Clinton a Al
Qaeda en Bosnia y Kosovo (como lo hizo el equipo de Carter-Brzezinski
en 1978 en Afganistán para destruir el gobierno socialista del
país), convirtió en Bosnia en una base del “yihadismo” a la que llegaron miles
de individuos reclutados por la «Red Islámica Militante” coordinada por el
Pentágono. La masacre de cientos de miles de civiles yugoslavos fue bautizada
como “intervención humanitaria” de la OTAN y aquel país se rompió para que entre otros
propósitos, EEUU instalase en el corazón de Europa, en Kosovo, su
segunda base militar más grande en el mundo llamado Camp Bondsteel (¡la primera
también está en Europa: Stuttgart!). La base incluye un mini Guantánamo, como
reveló en 2005 el comisario de Derechos Humanos del Consejo de Europa, Álvaro
Gil Robles. Kosovo “por casualidad” es otra cantera del Estado Islámico: Blerim
Heta, el kosovar que el 24 de marzo de 2014 mató en un atentado en Iraq a 52
personas en Iraq trabajó en esta base. ¿Por qué EEUU pretende
provocar caos en Iraq?
+En 1998, bombardeo del laboratorio
farmacéutico de Al-Shifa en Sudan para desviar la opinión pública del escándalo
Lewinsky. Afganistán también recibió toneladas de bombas en estas fechas y
durante todo el mandato del trío criminal Clinton-Al Gore-Albright. Decenas de
miles de afganos murieron bajo las bombas o por la contaminación de sus aguas,
sus suelos y su aire. Afganistán
¿Por qué?
+En 2000 propuso ataques militares rápidos y
efectivos contra los “estados rebeldes”, por representar “una amenaza emergente
para nuestro país”, riéndose de los tratados internacionales al respecto y de
la mismísima ONU.
+En 2002, Al Gore también apoyó la guerra
“preventiva” de Bush contra Iraq y, ante las “dudas” sobre la existencia de armas
de destrucción masiva de Saddam, le ofrece otro pretexto: “Iraq representa una
seria amenaza para la estabilidad del Golfo Pérsico y debemos organizar una
coalición internacional para eliminar su acceso a las armas de destrucción
masiva”, insistiendo en la “excepcionalidad de EEUU, y que ninguna ley
internacional puede impedir a este país tomar medidas para proteger sus
intereses vitales.
Al Gore nunca participaría en una cumbre
antimilitarista.
El
currículum ecológico de Al Gore
*En 1979, el diputado Al Gore, defendió a
ultranza la construcción de una presa sobre el río Little Tennessee, sin que sirviera
para el control de inundaciones ni generara energía; simplemente quería llenar
el bolsillo de unas empresas de construcción, recuerda el diario Counterpunch.
Ante la protesta de los ecologistas (¡las verdaderas!) de que la presa iba a
acabar con la vida de varias especies protegidas, Al Gore y sus compañeros
llegaron a chantajear al presidente Carter que si vetaba la ley retendrían el
apoyo demócrata al Tratado del Canal de Panamá. Aquello sentó la base para que
los empresarios consiguieran saltarse la Ley de Especies en Peligro de
Extinción en otras regiones del país, asegura el ambientalista David Brower.
*Suele afirmar que ‘Todos somos responsables’
de la catástrofe ecológica, ocultando el que el 80% de las agresiones contra el
medio ambiente se cometen por las grandes corporaciones o que el consumo de
energía de un ciudadano medio del primer mundo es 70 veces más que uno en los
países en desarrollo: borra, intencionadamente, las líneas que separan los
ricos de los pobres, a los mercaderes de los consumidores.
*Fue la Fundación Alianza para la Protección
del Clima de Al Gore que propuso el uso de biocombustible, como energía
renovable, fabricando “Eco-coches”. El nuevo negocio para el sector energético
fue una tragedia para millones de personas pobres, cuyo alimento básico es a
base de patata, arroz y trigo, y ahora se veían expulsados de sus terrenos por
los grandes cultivadores de los “Bio”. Incluso lo que vivían de maíz y soja, ya
convertidos en agrocombustibles, fueron afectados por el invento: Las protestas
sociales del 2007 en Méjico, contra la subida del precio de maíz, utilizadas
para producir etanol en EEUU desenmascaraban las soluciones clasistas para
salvar supuestamente el planeta, un negocio que ha causado la desertificación
de grandes superficies, la tala de millones de árboles y la destrucción de
pastizales. Además, la erosión del suelo por la sobreexplotación, entre otros
motivos, desmiente que este tipo de energías sean tan renovables en un periodo
corto de tiempo: acelerarán el calentamiento global.
*Tras el fracaso de agrocombustibles, ahora nos
quieren vender productos “inteligentes” para un Smarter Planet”, y su Greenwashing tomando
por tonta la Tierra y sus habitantes.
Un activismo por el negocio propio: “¿Crees que
hay algo malo en estar activo en los negocios en este país?”, respondió Gore a
quienes le critican por utilizar su puesto y su influencia con el fin de
engordar su cuenta bancaria. Nuestro ecologista es socio de varias compañías de
“productos inteligentes de ahorro de energía” como Silver Spring, que fabrica
software para hacer más eficiente a la red eléctrica y recibe parte de los 3.4
mil millones de dólares en subsidios del Departamento de Energía de EEUU.
Cuando dejó el gobierno en 2001, Al Gore tenía un patrimonio de 1,7 millones de
dólares. Gracias a su negocio “verde”, asesoramientos, conferencias verdes
(100.000 dólares por ponencia), los derechos de sus películas y libros verdes,
invertir en compañías como Apple, Google, paneles solares e incluso urinarios
sin agua, su patrimonio se ha disparado: en 2003 tenía 200 millones de dólares,
según la agencia Bloomberg. Con este ritmo ¿Cuánto tendría hoy?
La actual presidenta del Congreso de EEUU Nancy
Pelosi , también presente en la Cumbre de Madrid, es otra de las grandes
empresarias de los productos Bio.
Ofrecer soluciones ridículas e inútiles para
estafar a la audiencia: usar menos agua caliente, pide Al Gore, lo que
significaría unos 700.000 galones de gasolina por día en EEUU, siendo sólo el
0.15% del combustible consumido a diario del país. Según FAO, cada minuto, el
capitalismo salvaje acaba con una extensión de bosque equivalente a 40 canchas
de fútbol, unos 13 millones de hectáreas al año. También ha propuesto multar a
las empresas de carbono pidiéndoles plantar árboles (¡de “tener hijos y
escribir libros” se encargará Al Gore!). Él sabe que en las tierras
contaminadas no crecen ni ortigas. En Nigeria la petrolera anglo-holandesa
Shell ha sido acusada de «complicidad en asesinato, violación y tortura» de los
nigerianos en la década de 1990: la petrolera había creado una unidad secreta
de espionaje, que pasaba información sobre los molestos ambientalistas a la
agencia de seguridad nigeriana, a la vez que pedía al presidente-general Sani
Abacha “resolver el problema». Y lo hizo: ahorcó a 9 líderes ecologistas, mató
a más de 1.000 manifestantes y destruyó unas 30.000 viviendas en la aplicación
de la política “Tierra quemada”. Así, Shell podía llevarse un millón de
barriles de petróleo al día, y contaminar el medio con tranquilidad. Y luego
preguntan ¿Por qué los
nigerianos se echan al mar en pateras dejando su hogar?
Esperen y verán que gente como Al Gore
aparecerá en una cumbre para presentar bombas ecológicas e inteligentes que no
contaminan: solo matan a personas, y sólo a los pobres, que son los únicos que
no pueden huir de una zona en guerra.