Nazanin Armanian
www.publico.es /031018
“Peligrosos niñatos” es como los círculos
políticos de Oriente Próximo llaman, y no en voz baja, al príncipe heredero de
Arabia Saudí, Mohámed bin Salman (MBS) y su colega emiratí, Mohámed bin Zayed
(MBZ). La gerontocracia, reliquia de los tradicionales concejos de “barbas
blancas”, que alaban la moderación y el templo, les acusa a MBS de 33 años y a
MBZ de 56 de estar sacrificando la vida de miles de personas en la región, así
como la paz mundial por sus impertinentes ambiciones militares y hacer de reyes
sin aun serlos.
Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos
(EAU), en los últimos años han intervenido militarmente en Yemen, Siria, Libia,
han patrocinado el golpe de estado de Al Sisi en Egipto, han impuesto un bloque
económico y político a Qatar, están financiado con 130 millones de dólares la
alianza militar “G5 Sahel”, para el saqueo de África, y han llegado a amenazar
a Irán.
En su inquietante aventura, los dos
“chavales”, respaldados por un tercero, el yernísimo de Trump, Jared Kushner de
37 años, han desactivado el Consejo de Cooperación del Golfo (Pérsico),
formando el Consejo de Coordinación Saudí-Emiratí para imponer sus directrices
al resto de los países de la zona, aterrados por los mega almacenes de armas y
el poderío económico de los chantajistas.
Aunque MBZ, mandatario de una pequeña
federación de siete sultanatos de 9 millones de habitantes, se ha diseñado un
perfil bajo, es el verdadero mentor del arrogante MBS, a quien no le preocupa
la imagen que de su país al mundo, a
pesar de sobornar a la prensa para ocultar la demolición de Yemen con sus
gentes dentro.
Las dos monarquías árabes sunitas son
dictaduras absolutistas de clanes familiares, sin instituciones políticas o
sociales, dirigidas por un varón, que, aunque simulan movimiento, no es hacia
delante: lo hacen sobre el mismo punto, justamente para no cambiar nada,
actualizando la Edad de Piedra sobre todo en lo que refiere a los derechos de
la mujer. La asociación de los señores de guerra MBS-MBZ que ha puesto fin al
sistema colegiado que dirigía los dos estados, no oculta sus diferencias: el
primero está obsesionado por Irán mientras el segundo por Qatar y la
organización religiosa de Hermandad Musulmana, rival del wahabismo.
Según WikiLeaks, este príncipe, después de
que EEUU en 2001 bombardeara la sede del canal qatarí Al Jazeera en Kabul, le
pidió en 2003 hacer lo mismo con las instalaciones de la emisora en Doha. El
jeque emiratí consiguió que Donald Trump vinculara a Qatar con el terrorismo
yihadista y guardara silencio sobre los
vínculos de ELLA y Arabia con el Estado Islámico. The New York Times
señaló directamente al papel de los dos jeques en la destitución de Rex
Tillerson, después de que el Secretario de Estado de Trump impidiera un ataque
militar saudí-emiratí a Qatar y exigiera el fin al bloqueo que sufre el país
desde el junio de 2017 por tierra, mar y aire. ¡Es increíble cómo dos pequeños
estados, al
igual que Israel, tengan tal influencia sobre las políticas de la
superpotencia!
MBS sueña con transformar Arabia en un
EAU: una dictadura militarista con rostro amable, diversificar la economía,
reducir el papel de la casta religiosa, aunque le será difícil al saudí simular
un federalismo que aparenta EAU, reducir la influencia de la poderosa secta
religiosa wahabita y establecer “a César lo que es César”, con unas supuestas
reformas –como crear una ciudad de ocio y permitir la conducción de mujeres-,
con el fin de cambiar la legitimidad tribal-religiosa por otra
político-carismática. Pero, los métodos empleados por este joven no son nada
“amables”, ni con los suyos: fue capaz de secuestrar
al primer ministro libanés, a 11 príncipes y 38 ex ministros saudíes, y
someterles a su voluntad, simulando a Don Corleone.
Hace tres años, y días antes de irse de
vacaciones a las Maldivas, MBS ordenó la agresión militar a Yemen, provocando
la catástrofe
humanitaria más grave del mundo después de la Segunda Guerra, en la
que 20 millones de seres humanos agonizan de hambre y enfermedades ante la
indiferencia del planeta. De paso, MBS que ha arrancado la máscara de
“demócrata” a sus cómplices occidentales -quienes le dan la gasolina para
mantener el fuego de este infierno-, se niega a reconocer su fracaso integral
en Yemen. A pesar de miles de vuelos de muerte sobre el país y gastar 5.000
millones de dólares al mes en su destrucción, insiste en intensificar los
bombardeos para un imposible triunfo. Los objetivos de Riad en Yemen siguen sin
cumplirse:
. Establecer su dominio político-militar
sobre el destino de Yemen.
. Construir un oleoducto que saldría de
Hadramaut, en Arabia, y terminaría en el puerto de Adén, para así esquivar el
Golfo Arábigo y el estrecho de Ormuz para exportar su petróleo en
caso de una guerra con Irán. También ha rehabilitado el antiguo
oleoducto IPSA (Iraqí Pipeline in Saudi Arabia) construido por Sadam Husein
durante la guerra que mantuvo con Irán (1980-88), en el puerto del Mar Rojo.
. Convertirse en el gendarme de la zona,
ocupando el lugar del Sha de Irán en los años setenta, aplastando
los movimientos progresistas de la región, como el de Dhofar.
Ambiciones
talasocráticas de EUA
A falta de considerables reservas
petrolíferas, los EAU pretende dominar las rutas comerciales marítimas de la
región, convirtiéndose en una potencia. Por el momento ha alquilado puertos en
el Cuerno de África (Eritrea y Yibuti), controla Socotra, la más importante de
las cerca de 200 islas que tienen Yemen, ha ocupado militarmente el puerto de
Adén con la ayuda de los mercenarios de Al Qaeda y el uso de los drones marca
Depredador XP, que se despliegan de la base militar que ostenta en Assab,
Eritrea, para atacar la resistencia yemení. Ha amenazado al gobierno de Yemen
que, si le obliga a desocupar el puerto, prestaría su apoyo a los rebeldes
hutíes, a pesar de que se supone que EAU está atacando este país bajo el
pretexto de “luchar contra los chiitas hutíes patrocinados por Irán”.
Estados
Unidos, vigila
Es falso que EEUU y otros países
occidentales sólo prestan apoyo logístico a los invasores. El 26 de marzo del
2015, EEUU y Reino Unido bombardearon el aeropuerto de Saná, hospitales,
escuelas, hogares, dejando cientos de muertos y heridos, entre ellos un
centenar de niños. Un día antes, John Kerry había viajado a Arabia Saudí, y un
día después, Riad, a través de su embajador en Washington anunciaba la guerra.
Entre los objetivos de EEUU en Yemen
están:
. Entrenar a la “OTAN sunnita” en un
combate real antes de enfrentarla con Irán.
. Controlar el estrecho de Bab-el-Mandeb,
desde donde China comercia con los países del Mar Rojo y del Mediterráneo.
. Proteger los intereses de Israel, ya que
este estrecho conecta y le une con el Océano Índico.
A Washington no se le escapa que, el Príncipe
Bin Salman:
. Está desestabilizando la monarquía
saudí: no sólo ha implantado una impopular austeridad, recortando los subsidios
y salarios mientras se compra el super yate Sereno por 500 millones de dólares,
sino que también persigue a los hombres poderosos del reino y confisca sus
fortunas: en la retina, el asesinato del poderoso rey Faisal en marzo de 1975 a
mano de su sobrino el príncipe Faisal bin Musa’id.
. Ha establecido buenas relaciones con
Rusia, comprándole armas que
incluyen los misiles S-400.
. Ha congelado la prometida venta del
5% de la petrolera Aramco. Pues, MBS no contaba con que para la
entrada de la compañía en la bolsa debería revelar sus cuentas, incluidas las
B, que oculta la corrupción y el robo de la renta del recurso natural del país
por la “familia” al Saud. Tampoco ha explicado cómo los activos externos netos
del país cayeron de los 730.000 millones de dólares del 2011 a los 493.000
millones en 2017.
. No ha podido aislar a Qatar y forzarle a
romper sus relaciones cordiales con Irán.
EEUU también vigila a MBZ:
. Su autoritarismo, que amenaza la
integridad de la federación: vale que el jeque presione al emirato Dubái para
que se aleje de Irán, pero que el príncipe Rashid bin al Sharqi, del emirato
Fujairah, tenga que pedir asilo político en Qatar, huyendo de la “tiranía de
MBZ” como afirmaba, hay un trecho. Es más, que ambos “jóvenes” hayan
establecido un gran negocio con China, y están abandonando el dólar en sus
transacciones en favor de yuan, puede que sea, incluso, imperdonable.
Los “niñatos” no
tienen ninguna intención de poner fin a la guerra contra Yemen, y si
sus planes siguen adelante, la región se hundirá en más conflictos y además con
nuevos actores involucrados: Qatar, para protegerse de EEUU, Arabia y EAU ha
cedido una base militar a su aliado turco, el “Hermano Musulmán” Tayyeb
Erdogan.