Por: Miguel
Antonio Bernal
Con el
descaro propio de quienes obstruyen la construcción de un Estado Constitucional
y Democrático en Panamá, se nos comunica que "Odebrecht Panamá ha suscrito
un Acuerdo de Colaboración Eficaz con el Ministerio Público..."
Este "Acuerdo para acordar" reasegura a la
cleptocracia gubernamental (mezcla de autocracia con impunidad), y continuar
así su actuar para que Panamá no sea un país y, sea un negocio para coimeados y
coimeadores.
Mientras los coimeados por Odebrecht se regordean con el "Misterio
Público", sus coimeadores cínicamente, "piden disculpas a la sociedad
panameña". El comunicado de marras, igual que la Procuradora y su
relacionista pública, nos piden que confiemos en ellos, para que puedan así,
seguir actuando irracionalmente de espaldas a la ciudadanía.
La voragine que vivimos -desde hace tres lustros, en materia social y de
política de Estado, pisotea las grandes mayorías nacionales. Cada día hay menos diálogo,
menos debate pero, eso si, más manipulación mediática, más imposiciones, más
arbitrariedades, más abusos de autoridad y de extralimitación de funciones.
Ya he señalado que: "El debido proceso es pisoteado a
diario, las garantías fundamentales irrespetadas, mientras que los
Derechos Humanos son, cada vez más, un espejismo. El país político vive un
carnaval permanente de farsa en farsa, mientras construye su próximo escenario
para la tragedia, que les sirva de pretexto para permanecer en el poder,
monopolizando todo, destruyendo –cual comejen-cualquier vestigio de institucionalidad
y reforzando la camisa de fuerza que les permita mantener secuestrada cualquier
aspiración democrática.
El "Acuerdo de Cooperación Eficaz" nos debe llenar de vergüenza
pues, pisotea los principios básicos del Derecho constitucional y, manipula el
caso Odebrecht para impedir que la población pueda saber la verdad y los
nombres de los coimeados y ladrones, de los más de tres mil millones de
balboas, que nos pertenecen a todos.