"Quórum Teológico" es un blog abierto al desarrollo del pensamiento humano y desea ser un medio que contribuya al diálogo y la discusión de los temas expuestos por los diferentes contribuyentes a la misma. "Quórum Teológico", no se hace responsable del contenido de los artículos expuesto y solo es responsabilidad de sus autores.

Ya puedes traducir esta página a cualquier idioma

Déjanos tu mensaje en este Chat

OTRA MARCHA CIUDADANA

Miguel Antonio Bernal V.

Tempranamente, la marcha ciudadana contra  la corrupción y la impunidad, celebrada el pasado miercoles 21 de junio, se vió ultra silenciada gracias a  la iniciativa de quienes  la adversaron, los unos cegados por sus envidias y miopias, los otros para seguir encubriendo sus delitos.

 Pese a ello,  los ciudadanos que marchamos desde la Iglesia del Carmen hasta la Plaza Porras, volvimos a darle al país, el calor de la iniciativa, la creatividad y la espontaneidad ciudadana que se requiere en nuestras calles.

  Convocada para reafirmar el rechazo de la ciudadanía a la impunidad y la exigencia de cárcel para los corruptos, así como la renuncia de la Procuradora y el Contralor por incumplimeinto de su juramento constitucional, los ciudadanos se hicieron presentes con sus propias pancartas. Las consignas, ya conocidas: “Queremos la verdad, no más imunidad”,“Si Odebrecht no se va, Varela pagará”, “Queremos procuradora, no una encbridora”, “Queremos Contralor, no un encubridor”, “Que lo sepan los diputados, este pueblo está cabreado”, “Que devuelvan el dinero, la partida de coimeros

  Panamá y los panameños, requerimos con urgencia notoria, un nuevo compromiso con el decoro, la dignidad y la decencia, de parte de todos los actores del proceso de participación ciudadana, para poder construir y reconstruir el tejido social entre administración pública (instituciones) y ciudadanía (participación). Para ello, el libre acceso a la información y la transparencia y rendición de cuentas son tan importantes como la ausente independencia judicial.

Por ello, cabe destacar aquí que, flaco favor le hace al país el cierre constante de la Universidad de Panamá por parte del Rector Flores. Hoy, más que antes, la Univesidad debe abrir sus puertas al debate. Cerrarla es una contribución a la corrupción.

Urge entonces, castigar ejemplar y debidamente a los responsables directos e indirectos del atraco al erario y de las graves violaciones a los Derechos Humanos, para empezar a salir del tunel. Urge redoblar nuestros compromisos ciudadanos y preparar nuevas acciones ciudadanas, le pese a quien le pese…