"Quórum Teológico" es un blog abierto al desarrollo del pensamiento humano y desea ser un medio que contribuya al diálogo y la discusión de los temas expuestos por los diferentes contribuyentes a la misma. "Quórum Teológico", no se hace responsable del contenido de los artículos expuesto y solo es responsabilidad de sus autores.

Ya puedes traducir esta página a cualquier idioma

Déjanos tu mensaje en este Chat

Desde nosotros

 


Guillermo Castro H.

 

La filosofía de la praxis no sólo pretendía explicar y justificar todo el pasado sino también explicarse y justificarse históricamente a sí misma, es decir, era el “historicismo” máximo, la liberación completa de todo “ideologismo” abstracto, la conquista real del mundo histórico, el comienzo de una nueva civilización.

Antonio Gramsci

 

Al reflexionar desde el presidio político -entre fines de la década de 1920 y comienzos de la de 1930- sobre la formación de lo que llamó la filosofía de la praxis, Antonio Gramsci empieza por aludir a una tesis clásica planteada por Vladimir Lenin década y media antes.[1] “Se afirma”, dice Gramsci, que la filosofía de la praxis “ha nacido en el terreno del máximo desarrollo de la cultura de la primera mitad del siglo XIX, cultura representada por la filosofía clásica alemana, la economía política inglesa y la literatura y la práctica políticas francesas. Y añade:

 

En el origen de la filosofía de la praxis se encuentran estos tres movimientos culturales. Pero ¿cómo se debe entender esta afirmación? ¿En el sentido de que cada uno de estos movimientos ha contribuido a elaborar respectivamente la filosofía, la economía y la política de la filosofía de la praxis? ¿O bien en el de que la filosofía de la praxis ha elaborado sintéticamente los tres movimientos, es decir, toda la cultura de la época, y que en la nueva síntesis, cualquiera que sea el momento que se examine, momento teórico, económico, político, se vuelve a encontrar, como “momento” preparatorio, cada uno de los tres movimientos?

 

Y concluye: “Así lo creo, precisamente.”

En efecto, para Gramsci la filosofía de la praxis presupone “todo este pasado cultural, el Renacimiento y la Reforma, la filosofía alemana y la Revolución francesa, el calvinismo y la economía clásica inglesa, el liberalismo laico y el historicismo que se encuentra en la base de toda la concepción moderna de la vida.” En esa perspectiva, dice, la filosofía de la praxis

 

es la coronación de todo este movimiento de reforma intelectual y moral, cuya dialéctica es el contraste entre cultura popular y alta cultura.(c:gc) Corresponde al nexo de Reforma protestante más Revolución francesa: es una filosofía que es también política y una política que es también filosofía. Está atravesando todavía su fase popular, folklórica: suscitar un grupo de intelectuales independientes no es cosa fácil, exige un largo proceso, con acciones y reacciones, con adhesiones y disoluciones y nuevas formaciones muy numerosas y complejas

 

Lo más esencial, aquí, radica en que la filosofía de la praxis “es una concepción nueva, independiente, original, pese a ser un momento del desarrollo histórico mundial, es la afirmación de la independencia y de la originalidad de una nueva cultura en incubación, que se desarrollará al desarrollarse las relaciones sociales.” Por lo mismo, en su desarrollo opera “una combinación variable de lo viejo y lo nuevo, un equilibrio momentáneo de las relaciones culturales correspondiente al equilibrio de las relaciones sociales”.

A esto se debe que, en cada momento de su desarrollo, esta filosofía solo puede presentarse inicialmente “con una actitud polémica y crítica, como superación del modo de pensar precedente y del pensamiento concreto existente (o del mundo cultural existente)”. Por ello, debe presentarse ante todo “como crítica del ‘sentido común’ […] y, por tanto, de la filosofía de los intelectuales,” que puede ser considerada “como la ‘punta’ del progreso del sentido común, por lo menos del sentido común de los estratos más cultos de la sociedad y, a través de éstos, también del sentido común popular.”

       ¿Cómo se expresan estas observaciones en el proceso de formación de un pensar orientado a la transformación de la realidad en un sentido revolucionario en nuestra América?

¿Se hace descartando todo lo que en un momento dado parece merecer los adjetivos de reaccionario y obsoleto? ¿O desde la ampliación constante de los espacios de expresión de las raíces que expresan nuestros procesos de formación, desde los saberes comunitarios indígenas y campesinos hasta el liberalismo democrático radical de José Martí, el socialismo indoamericano de Mariátegui y la teología de la liberación, por citar apenas algunas?

Difícil tarea esta, en una región en la que, al decir de Gramsci, la base del desarrollo cultural acusa el influjo de “los cuadros de la civilización española y portuguesa del 1500 y del 1600, caracterizada por la Contrarreforma y por el militarismo parasitario”, cuyas cristalizaciones intelectuales afloran en la crisis que vivimos. Fue desde una circunstancia tal que Martí planteó a comienzos de la década de 1890 la necesidad de una revolución democrática antimperialista de liberación nacional, y de los medios políticos y morales para lograrla, mientras Mariátegui, en la de 1920, llegó al concepto de un socialismo indoamericano que expresaba – sin él saberlo - el vínculo entre el modo de producción en su sentido más abstracto, y la formación económico-social concreta del Perú.

Han quedado atrás los tiempos de la condescedencia de una ortodoxia – en el mal sentido del término – que se permitía vincular al primero -en el mejor de los casos-, a una pequeña burguesía cuyo progresismo aspiraba a una unidad de clases sociales imposible, o al peruano que lo incorrecto de pensar siquiera que al socialismo no le bastaba con ser marxista-leninista en nuestra América, sino que debía ser sobre todo creación heroica, y no copia ni calco. Lo importante, hoy, es que ambos – y tantos más - han sido absueltos por la historia, y aún nos enseñan la importancia del pensar lo político desde la ética, y de la propia identidad como base de la unidad en la lucha por las transformaciones sociales que nuestros pueblos demandan, a sabiendas o no.

 

Alto Boquete, Panamá, 7 de septiembre de 2021

Señor, haznos Instrumentos de tu paz


Por: Rev. Pbro. Manning Maxie Suárez +

El próximo 4 de octubre, el mundo cristiano celebra con gratitud los 795 años de la vida y obra de un gran hombre, “Giovanni Francesco Bernardone”, oriundo de Asís y quien vivió entre los años 1182 al 1226 d.C., fue un gran santo, mejor conocido como hoy como San Francisco de Asís.   Muchos estudiosos de su vida, hablan de él como un gran místico y un gran predicador.  No era conocido como un hombre intelectual a pesar de que venía de una familia rica de esa localidad, al contrario de ello fue mundano en su juventud y despreocupado de las cosas importante de la sociedad de su tiempo.  Pero en la guerra de Asís, su pueblo natal contra Perugia, ciudad de Italia central, capital de la provincia de Perugia y de la región de Umbría, Italia donde estuvo encarcelado por más de un año y enfermando de gravedad su situación le permitió reflexionar sobre su vida dando un cambio radical a la misma.

Entregado al Señor Jesús, y estando en el monte Alverno, Francisco sintió un dolor mezclado con placer; y en su cuerpo aparecieron las marcas de la crucifixión de Cristo, mejor llamadas los estigmas, signos profundos de esa relación de amor que tenía con nuestro Señor Jesucristo. Resultado de la misma, a Francisco se le atribuye muchas poesías y cánticos como el Cántico de las criaturas en 1225,
  y aquella hermosa oración sobre la paz que dice: “Señor, haznos instrumentos de tu paz. Donde haya odio, sembremos amor; donde haya ofensa, perdón; donde haya discordia, unión; donde haya duda, fe; donde haya desesperación, esperanza; donde haya tinieblas, luz; donde haya tristeza, gozo. Concede que no busquemos ser consolados, sino consolar; ser comprendidos, sino comprender; ser amados, sino amar. Porque dando, es como recibimos; perdonando, es como somos perdonados; y muriendo, es como nacemos a la vida eterna. Amén.  San Francisco de Asís, llegó a ser canonizado en el año 1228. Y en 1980, el papa Juan Pablo II, le proclama patrón de los ecologistas.

De esta oración sale el clamor de un hombre santo pidiéndole a Dios que nos dé el don de ser “Instrumento de su paz”.  Esa misma paz, que Jesús prometió a sus apóstoles y discípulos a través de estos dos últimos siglos.  La palabra paz, tan antigua como el mundo, en el idioma original de la biblia antigua (Shalom) significa lo opuesto de la turbación, la cesación de la guerra, pero puede referirse también a esas relaciones profundas entre Dios y el hombre como señala san Pablo en su carta a los romanos “Por tanto, habiendo sido justificados por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo,”[5,1].

Hoy más que nunca necesitamos escuchar la súplica de san Francisco en nuestra tierra bendita, vivimos hoy día en un mundo inseguro y nuestro pueblo en las calles de nuestro país se sienten sin paz.  Pero la Paz no vendrá a nuestras vidas a través de la aplicación de una política pública o a través de un decreto ejecutivo o de una orden directa del ministerio de Seguridad Pública de nuestra nación.  La verdadera paz solo viene de Dios, es una dádiva, un carisma, un don y se da al hombre cuando este reconoce su necesidad de la presencia de Dios en su vida.  Solo cuando el Espíritu de Dios nos inunde podremos ver en nuestras vidas y en las vidas de los que tocamos con nuestras acciones el fruto de esa paz, sembrando en los mismos amor; perdón; unión; fe; esperanza; luz; y gozo.  Podremos entonces consolar; comprender a los demás y amar a todos.

Cuando el Espíritu de Dios nos inunde con su presencia, por medio de su  gracia Dios perdona nuestros pecados, ilumina nuestras mentes, aviva nuestros corazones y  fortalece nuestras voluntades, convirtiéndonos en signos externos y visibles de una gracia interna y espiritual, dados por Cristo mismo como medios seguros y eficaces por medio de los cuales recibimos esa gracia día tras día, como nos enseña el catecismo convirtiéndonos en verdaderos “Instrumentos de su Paz”.

El Papa Francisco y líderes cristianos de nueve Iglesias de otras denominaciones recientemente en el vaticano, se reunieron para orar juntos y se comprometieron a colaborar para llevar el mensaje de paz al mundo y en especial al Líbano.  También en otras ocasiones ha citado a los mismos el día en que se celebra la festividad de San Francisco de Asís para orar por la paz del mundo, Ojalá que este año sus plegarias sean escuchadas y el mundo logré vivir en la paz de Dios. Envíanos Señor al mundo como “Instrumentos de tu paz”.

Sacerdote

Somos los responsables directos del deterioro sistemático de nuestra única Casa Común.


Por: Rev. Pbro. Manning Maxie Suárez +

Preocupante e inquietante es la situación del clima en nuestro planeta, que viene haciendo estragos en la vida y la economía de todos los países del mundo.  Pareciera ser que ahora sí hemos cruzado esa línea de “no sustentabilidad de la vida” y que no importa lo que hagamos en estos momentos como humanidad, vamos a tener que pagar caro los estragos que le hemos realizado al planeta con nuestros modelos socio económicos y de tendencia extractivista, que vienen desde la época de la industrialización y que no permiten que haya una reducción sustancial y sostenida de las emisiones de dióxido de carbono (CO2) y de otros gases de efecto invernadero. 

El 9 de agosto del año 2021, el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), publicó un comunicado que ha dejado preocupado a todos los gobiernos, científicos y medio ambientalistas del mundo, respecto a los cambios en el clima en todas las regiones del planeta.  En dicho informe, Hoesung Lee, Presidente del IPCC, comenta y cito: “Muchos de los cambios observados en el clima no tienen precedentes en miles, sino en cientos de miles de años, y algunos de los cambios que ya se están produciendo, como el aumento continuo del nivel del mar, no se podrán revertir hasta dentro de varios siglos o milenios”.  Necesitaríamos, tomando las medidas y políticas pertinentes, entre 20 y 30 años para lograr que las temperaturas mundiales se estabilizasen, según el informe del Grupo de Trabajo I del IPCC, Cambio Climático 2021.

A qué no vamos a enfrentar si no lo hacemos, sobrepasaríamos el nivel del calentamiento global de 1,5 ºC o incluso a 2 ºC en las próximas décadas.  La Copresidenta del Grupo de Trabajo I del IPCC, Valérie Masson-Delmotte señaló que “Ahora tenemos una visión mucho más clara del clima pasado, presente y futuro, lo que es fundamental para entender hacia dónde nos dirigimos, qué se puede hacer y cómo podemos prepararnos.”

Cuando leía este informe, me preguntaba a lo interno, ¿Cuántos panameños y residente de esta república conocen esta información?, ¿Sabrán nuestras autoridades de gobierno como las diferentes Ong´s lo que se nos va a venir encima y qué ya los países del norte como los de Europa y Asia están viviendo?  Válgame Dios, yo leo noticias y las veo por los medios locales e internacionales y no he visto el mínimo interés de los mismos sobre el tema.

Necesitamos tomar decisiones más acertivas y radicales.  Necesitamos decirle a la ciudadanía que el reciclaje en este país debe ser obligatorio y a partir de ayer; Debemos eliminar los carros que consumen gasolina y Diesel y movernos hacía los autos eléctricos y solares; Que el consumo eléctrico sea de fuentes hidroeléctricas y de sistemas eólicas; Eliminar del mercado los insumos plásticos contaminantes; Que la reforestación sea una ley obligada y permanente hasta que reforestemos todos el país, etc, etc.  Es decir, ir creando una “Cultura Verde” que se promueva desde la infancia para que las nuevas generaciones vivan en armonía con la madre tierra.

Aquí jugará un papel de suma importancia todo el sistema educativo panameño incluyendo las Universidades del País.  Existen ya en Panamá grandes esfuerzos por parte de algunas Universidades sobre el este tema y me refiero a la Universidad Tecnológica Oteima que tiene como lema “Vive Verde”, esta Universidad tiene en su sede de David, todo su sistema eléctrico conectado a paneles solares dando un ejemplo sin igual a otras instituciones.  Además, cuenta con el Centro Batipa de Investigación y Formación para el Desarrollo Sostenible con la idea de contribuir a la creación de un polo científico y tecnológico para el desarrollo sostenible en el occidente de la república de Panamá.  Este Centro cuenta con el reconocimiento y el apoyo de Senacyt, la Fundación Natura y de la fundación de la Ciudad del Saber.  Un ejemplo a seguir de Innovación en las Academias de Panamá.

El cambio climático ya afecta de múltiples maneras a todas las regiones de la Tierra. Todo aumento del calentamiento exacerbará los cambios que estamos experimentando”, declaró el Copresidente del Grupo de Trabajo I del IPCC, Panmao Zhai. El informe al que hemos hecho referencia nos señala que tenemos solo 20 años para tratar de revertir un poco los daños, no tenemos mucho tiempo.  Necesitamos del compromiso del gobierno y la sociedad civil para lograr dar nuestro grano de arena en la redención de nuestra Casa Común. 

Eco Teólogo

Sacerdote

Caminar una milla extra por Panamá

Por: Rev. Pbro. Manning Maxie Suárez +


Por todas partes en este país por donde caminemos, encontramos una situación tétrica y dantesca en los diferentes distritos y corregimientos de nuestra hermosa nación. La cuarentena necesaria, el cierre de miles de negocios y el desempleo galopante que ya suma el 20%, son algunas realidades con las que nos encontraremos. El Coronavirus y sus diversas variantes, nos ha sometido a todos en una batalla singular que está acabando con las pocas esperanzas de este pueblo como con la estabilidad mental de muchas personas. La informalidad se ha incrementado y como ya sabemos, 2 de cada 3 empleos en Panamá es informal. Nuestra economía en general está cada día más caótica pareciendo que la esperanza de días mejores se disipan en el horizonte. 

En medio de esta desesperación colectiva, hace falta que “nuestros líderes”, a todos los niveles, se empoderen con extraordinaria determinación y fe, debemos comenzar a levantar a nuestra nación del fango en que nos encontramos.  Las soluciones no la tienen ni el poder ejecutivo y mucho menos el legislativo, el poder para cambiar nuestra situación se encuentra en la voz del pueblo “Vox Populi, Vox Dei”, y es esa voz que nos llama ahora, que nos convoca a realizar un verdadero “Sacrificio Colectivo” donde el esfuerzo extraordinario de todos nuestros hombres y mujeres nos inviten a dar esa milla extra por Panamá.

En su momento histórico el presidente de la nación norteamericana John F. Kennedy exhortaba a su pueblo con aquella frase que quedó en la historia de esta nación: “No preguntes qué puede hacer tu país por ti, sino qué puedes hacer tú por tu país”.  Los que vivimos en esta nación, debemos responsabilizarnos por el futuro de la misma, necesitamos agarrar al “Toro por los Cachos”, y asumir nuestro papel histórico dando lo mejor de nosotros de manera pro activa.  Es el momento, como decía el inglés Winston Churchill de hacer nuestro sacrificio con “sangre, sudor y lágrimas”.  Debemos, la sociedad panameña buscar nuestro rumbo, nuestro norte y comprometernos en la construcción de una nación que respete y cumpla con las leyes de nuestra carta magna, para que vivamos con un corazón íntegro de manera que deseemos lo mejor para cada persona que viva en esta gran nación.

Hace dos mil años, un hombre que vivía en la antigua y sometida palestina por el imperio romano, Jesús de Nazareth dijo a su pueblo como una de las grandes máximas evangélicas lo siguiente: “Si te obligan a llevar carga una milla, llévala dos.” (Mateo 5, 41).  Este pasaje que se suman a aquellos valores que Jesús compartió después de dar su sermón del monte (Mateo 5), y que los cristianos de todos los tiempos deben seguir como una guía para su vida diaria, debe obligarnos a todos a tomarlos para sí como parte de nuestro código de conducta en esta vida.

Dice este pasaje del evangelista Mateo “Si te obligan a llevar carga una milla, llévala dos” (v 41).  Hoy, esa voz del pueblo, que es la voz de Dios, nos está pidiendo que escuchemos como pueblo, la voz del hijo de Dios: Jesús de Nazareth.  Necesitamos, por Panamá “Caminar esa milla extra por Panamá”.  Y como en tiempos de guerra, cansados, hambrientos, heridos y enfermos sigamos luchando por levantar a nuestra nación contra este horrible virus que ya ha cobrado la vida de más de seis mil quinientos (6,500.00) panameños. 

Oremos a él diciendo: “Omnipotente Dios, que nos has dado esta buena tierra por heredad: Humildemente suplicamos tu ayuda para mostrarnos siempre como un pueblo reconocido de tu favor y gozoso de hacer tu voluntad. Bendice nuestro país con labor honorable, conocimiento íntegro y costumbres virtuosas. Guárdanos de toda violencia, discordia y confusión; de orgullo, arrogancia y de todo mal camino. Defiende nuestras libertades, y forja un pueblo unido de las multitudes que han venido aquí de las diversas naciones y lenguas. Inviste con el espíritu de sabiduría a quienes en tu Nombre confiamos la autoridad del gobierno, para que haya justicia y paz en el país y que, por medio de la obediencia a tu ley, manifestemos tu alabanza entre las naciones de la tierra. En tiempo de prosperidad, llena nuestros corazones de gratitud, y en el día de la angustia, no permitas que nuestra confianza en ti desfallezca; todo lo cual te pedimos por Jesucristo nuestro Señor. Amén.  Ánimo Panamá.

Eco Teólogo

Sacerdote

Oración tomada del Libro de Oración Común de la Iglesia Anglicana

Situación de Informalidad en el Mercado Laboral de Panamá.

 
 La Lic. Cristal Lawson del Despacho Superior del Mitradel, La Lic. Johana González de la Dirección de Planificación del Mitradel y el Lic. Edward González de la Dirección de Finanzas y Planilla, todos Funcionarios del Ministerio de Trabajo y Desarrollo Laboral (Mitradel) expusieron ante la Mesa Temática Independientes (Formal e Informal), sobre el tema Situación de Informalidad en el Mercado Laboral de Panamá el día 14 de Junio, 2021 en el Marco del Diálogo Nacional por la Caja de Seguro Social.

La Importancia de entender y poner en práctica los valores cristianos.

Por: Rev. Pbro. Manning Maxie Suárez +

La Constitución Política de Panamá en el Título III Derechos y Deberes Individuales y Sociales Capítulo 1º. Garantías Fundamentales, en su artículo 35 señala: “Es libre la profesión de todas las religiones, así como el ejercicio de todos los cultos, sin otra limitación que el respeto a la moral cristiana y al orden público. Se reconoce que la religión católica es la de la mayoría de los panameños”.  Es decir, que la mayoría de la población cerca del 88% de la población está bautizada en la Iglesia Católica aproximadamente, en otras palabras, esta nación profesa que es cristiana.

Una nación cristiana, es una nación que cree y promueve valores como La fe que es don de Dios, El amor a sí mismo y al prójimo, El valor del respecto hacía la todo lo creado por Dios, a la práctica de la honestidad, a la lealtad a estos principios y sobre todo un valor ineludible y característico de todo cristiano que es la humildad.  Podríamos decir sin temor a equivocarnos que estos son valores fundamentales de la fe cristiana.

Ahora, tenemos que comprender que en estos últimos años y con mayor fuerza desde la II guerra mundial (1940 – 1944) en el siglo pasado, las sociedades en América Latina han estado sumergidas en un proceso socio político y religioso muy  doloroso que ha cambiado de forma drástica este universo, permitiendo nuevos y accidentados modelos de sociedades con tendencias, principios y valores “neo liberales”, algunos otros se han encaprichado en mantener un “ateísmo” a manera de protesta por los modelos de gobiernos que hemos tenido desde esas épocas hasta la post modernidad.  El Marxismo, disfrazado de socialismo, no ha tenido éxito en nuestras sociedades, promoviendo el totalitarismo y dolor y muerte, nos persigue como una sombra perturbadora en el desarrollo del devenir de nuestros pueblos.  Estos sistemas sociales y políticos (Neoliberales o Marxistas) ambos amenazan la existencia de una sociedad cristiana y por ello la Iglesia, extendida por todo el mundo, las rechaza de plano, porque son enemigas del mensaje de Jesús, sin embargo, la Iglesia está abierta a esa acción del espíritu para encontrar un camino en el modelo que nos invita Jesús: “El Reino de Dios”.  "Yo te digo que tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y las puertas del infierno no prevalecerán contra ella. (Mateo 16,18)."

Un Valor es algo preciado, es “un bien”, es lo más preciado que podemos tener en la vida.  Los cristianos tenemos en nuestras vidas, gracias a la acción del Espíritu de Dios, dones, carismas que se van convirtiéndose en valores fundamentales de nuestra vida.  Así estos dones se nos convierten en “misión de vida” y marca nuestra hoja de ruta en este devenir. Pablo de Tarso, cristiano y apóstol de la segunda generación de cristianos y uno de los primeros en escribir en lo que hoy conocemos como el nuevo testamento en la Biblia, enseñaba a la comunidad cristiana de corintios que el Espíritu de Dios da a cada uno alguna prueba de la presencia del Espíritu, para provecho de todos.  Es decir, los dones son dados para el beneficio de toda la comunidad y no para beneficio personal.

Como señalé, esos dones que derrama Dios como presencia de su mismo espíritu se nos he dado gratuitamente y como una “misión de vida” que se convierte en un gran valor para el que lo agradece en su vida.  A algunos se manifiesta la Sabiduría, a otros hablar con profundo conocimientos sobre los misterios de la vida, otros reciben el don de la fe, otros dones que les permiten curar a los enfermos, otros tienen poder para hacernos ver milagros y fortalecer nuestra fe, otros son profetas, otros distinguen aquellas personas que tienen malas intenciones “espíritus falsos”, a otros orar en lenguas y a otros el interpretar esas lenguas, dando a cada persona lo que a él mejor le parece. (1 Corintios 12,4-11).

Dones que se convierten en misiones de vida… ¿Cuál es el don que Dios te ha regalado?, ¿En qué nivel se encuentra su actividad en beneficio de toda la sociedad?, ¿Cuál es el grado de Testimonio que das en el nombre de Jesús a esta sociedad incrédula?, ¿Haz encontrado tu Misión de Vida?

Panamá, hoy que estamos viviendo situaciones que nunca pensamos que viviríamos, necesita hoy de tus dones y de tus talentos.  El mundo entero espera por ellos, tú tienes ese don preciado que necesita este mundo para que todos reciban esa gracia de Dios. Recordemos que toda la creación de Dios está esperando con impaciencia el momento en que Dios muestre al mundo quiénes son sus hijos (Rom.8:19).

Sacerdote

El Mercado Laboral Informal en Panamá

Dentro de las actividades que se realizan en el Diálogo Nacional por la Caja de Seguro Social de Panamá, en su reunión ordinario del 14 de junio, 2021 la mesa temática Independientes (Formal e Informal) invitó a conversar con los comisionados de esta mesa sobre el tema del Mercado Laboral Informal en Panamá al Director Nacional de Estadística y Censo (INEC) de la Contraloría General de la República el Magister Samuel A. Moreno P.

La espiritualidad como herramienta para un nuevo modelo de sociedad

Por: Rev. Manning Maxie Suárez

Para todos los que vivimos en este país, sabemos que nuestra sociedad vive una aguda crisis generalizada en los estamentos de la vida social.  Las cifras hablan por sí solas, pues el incremento de los delitos comparados a resultados de años anteriores nos dice que el deterioro de los principios y valores de convivencia social es una realidad.   Son muchos los argumentos que podríamos señalar como causantes de esta situación, por ejemplo: Los índices de oportunidades de educación con calidad, El Índice de pobreza multidimensional (IPM), la pobreza y pobreza extrema, que según PNUMA, en Panamá se concentran en las áreas rurales y particularmente, en las áreas indígenas, donde el 90% de su población es afectada por esta última condición. La desintegración familiar, un crecimiento económico, pero con altos niveles de desigualdad.

Según una reciente publicación del BID “Cómo combatir la delincuencia en América Latina” (Junio 2021), con el 9% de la población mundial, la región latinoamericana es responsable del 33% de los homicidios que ocurren en el mundo. Según encuestas como el Proyecto de Opinión Pública de América Latina (LAPOP), cerca de la mitad de los habitantes de la región considera que la delincuencia es el problema más acuciante de su país”. Es un tema que tenemos que ponerle mucho cuidado y debe ser tenido como uno de los temas de estado que de manera transversal permee todos los demás temas de seguridad.

Pero existe otra causa que permite que nosotros los seres humanos perdamos el sentido de la existencia deshumanizándonos con estas acciones, y esa es la falta de espiritualidad.  Un ser sin espiritualidad es un ser sin sentido de pertenencia a este mundo del cual proviene y pertenece. Piensan en negativo y  no dan importancia a la ética ni a los valores personales que le permitan socializar con sus coterráneos.

La espiritualidad es una dimensión humana de suma importancia.  Ella se sumaría a las ya existentes de igual importancia como las biológicas y social que son parte inherente a nuestro ser. Nos liga con aquello que aceptamos y consideramos es “más que nosotros” y nos determina, es aquello que le da sentido a nuestro actuar y pensar en la vida.  Muchas veces cuando hablamos del tema, la gente inmediatamente lo vincula a lo divino, pero puede ser también la apreciación que podamos tener hacía algo a lo cual le tenemos suprema estima y respeto, es más amplio que una religión en sí mismo.

Algo que podríamos señalar de una persona que posea espiritualidad es la madurez para la vida, el sentido común de las cosas se mezcla con el carácter y la voluntad de la persona permitiendo con ello que las personas puedan ser más centradas en sus principios, valores y por ende en sus acciones en la vida. 

En la vida cristiana eso solo es posible con la gracia de Dios, es decir con la acción del Espíritu Santo de Dios en nuestras vidas.  Sólo cuando nosotros dejamos que el Espíritu Santo tome y sea parte de nuestro ser, se hace el milagro de crecer en la madurez de vida en Cristo Jesús.  Los cristianos, no solo estamos llamados a creer en el Espíritu de Dios sino también dejarnos guiar en la vida por ese mismo Espíritu.  Los seres de buena voluntad que no son cristianos también son movidos por el mismo Espíritu de Dios.  Recordemos que Dios es el “Dios de todos”.  Con ese sentir, nuestras acciones en la vida estarán motivadas por la acción del mismo Espíritu. 

Las personas con espiritualidad buscan el bienestar común de la humanidad sin importar sus rasgos, sus credos, su estatus social, son pacientes con sus prójimos, tienen un carácter fuerte ante las vicisitudes y problemas que se les presenta en la vida, son perseverantes a sus principios y valores, no se unen con personas para patrocinar y participar en la maldad, al contrario de ello, buscan y se alegran por el bienestar de todos pues tienen conciencia y pertinencia del desarrollo y de la historia de su pueblo, son amantes de la justicia pero sobre todo son personas que creen en el amor y respeto al prójimo.

Necesitamos seguir educando y concientizando más a todos los que vivimos en este país en Ética y en Valores, educar en un nuevo estilo de vida, que todos los días hay que seguir construyendo esa sociedad que queremos todos con respeto al universo de las cosas.

Sacerdote.

Evolución, Situación y Perspectiva del Mercado Laboral de Panamá

Dentro del Marco del Diálogo Nacional por la Caja de Seguro Social (DNC) y en el desarrollo de la reunión ordinaria de la Mesa Temática de Independientes (Formal e Informal), el día 16 de junio de 2021 contamos con la presencia del Ing. René Quevedo quien nos presentó el tema: "Evolución, Situación y Perspectiva del Mercado Laboral de Panamá" El Ing. René Quevedo es Consultor Empresarial con 40 años de trayectoria internacional, con amplia experiencia en programas de formación técnica, emprendimiento, empleo e inclusión productiva de jóvenes y grupos vulnerables, para empresas del sector privado, público, y multilaterales, como el BID y la CAF. Durante 14 años laboró para la División de Consultoría de Ernst & Young en Latinoamérica, Estados Unidos y Europa. Ingeniero Químico, con un Master en Gerencia de Ingeniería y un MBA de la Universidad de Louisiana en Lafayette, USA. Catedrático de la Universidad Católica Santa María La Antigua y la Escuela de Gobierno de ADEN University. Frecuentemente consultado por medios de comunicación nacionales e internacionales sobre sus investigaciones relacionadas con empleo, emprendimiento e inclusión productiva.

Educación para la promoción de los valores y la decencia

Cada ciudadano que vive dentro de una “sociedad democrática” debe dar el ejemplo de respeto a los principios primordiales y fundamentales de la democracia”                                                                                                            Por: Rev. Manning M. Suárez + 

¿Somos una nación decente? La convivencia en una sociedad donde prevalezcan los valores, pareciera ser el sueño dorado de muchos pueblos de este mundo; especialmente el de Panamá. Pero más aún, es el sueño de millones de personas que en este planeta desean ver sus ideales cumplidos. Sin embargo, debemos admitir que cuando uno se acerca a las personas de esta nación y se habla del tema, muchas confunden la práctica de los valores cívicos y morales con un sistema político gobernante que va de escándalo en escándalo, ellos son desgraciadamente la noticia del momento. 

El sistema democrático como tal, y que se supone es el sistema en que los panameños hemos elegido y en el que deseamos vivir, tiene sus características bien definidas. Entre ellas tenemos que mencionar la observancia, de principios como valores fundamentales y universales. Estos principios y valores son los que componen su esencia como tal. Por ejemplo, podríamos señalar la libertad como la igualdad y el respeto a los valores humanos son valores democráticos fundamentales. 

Así pues, una sociedad que se dice llamar “democrática” tendrá que hacer el mayor esfuerzo posible de ir a la vanguardia en el ejercicio de la libertad, la igualdad y el respeto a los derechos humanos de los ciudadanos que componen esta nación. 

Por otro lado, la educación dirigida a la ciudadanía tendrá como fin, el concienciar y promover tales valores a través de programas educativos concretos y de modo transversal en toda su programación curricular, claro está, con especial esmero aquella que va dirigida a nuestros niños y jóvenes. He aquí la importancia trascendental de la promoción de una educación para promover la democracia y la decencia, pues tenemos la ardua tarea de reiniciar una empresa - dejada por más de una generación de panameños - de vivir conscientemente dentro de un sistema democrático que tiene como objetivo primordial la “dignificación del hombre”. 

Casualmente, es el sistema democrático el que hace énfasis en educar a las personas para que tengan un alto sentido de responsabilidad por sus acciones cotidianas, responsabilidad ante sus deberes y responsabilidad ante sus derechos naturales. De manera que, si tenemos que educar para promover los valores y la decencia, como sistema de vida de todos los panameños, debemos, de manera urgente, llevar a cabo una revisión de todos los programas de educación dirigidas al mejoramiento de los conceptos mencionados, fortalecer sus áreas en los horarios de las escuelas de todo el país ya sean estas públicas o privadas. 

Por otra parte, la sociedad civil debe hacer lo mismo, pues la promoción de la democracia y sus valores no es única y exclusiva tarea del gobierno de turno, sino de todos los ciudadanos del país. Es digno reconocer, por otro lado, el esfuerzo actual que se le está dando al tema de educar para promover los valores y la decencia que están llevando a cabo todos los clubes cívicos, el Ministerio de Educación, y muchas otras organizaciones y universidades de todo el país. 

Debe haber más apoyo de los medios de comunicación del país, todos ellos se han hecho eco de la necesidad urgente de seguir promoviendo los valores que soportan una “sociedad democrática”. Así como este esfuerzo, que merece reconocimiento de parte de los que nos interesamos por el tema, debemos seguir imitando esta tarea en conjunto, es decir, el Gobierno, la empresa privada, las asociaciones cívicas y religiosas, los partidos políticos, los sindicatos y todos los gremios, comenzar diálogos, talleres, seminarios, conferencias y acuerdos para seguir educando con el fin de promover los valores y la decencia en cada uno de sus miembros. 

El Gobierno, por su parte, debe continuar el gran esfuerzo en cada institución que lo represente dentro y fuera del país para que sea ejemplo de imitación que promueva los valores democráticos, respetándolos y practicándolos a través de la práctica de su código ético. Cada ciudadano que vive dentro de una “sociedad democrática” debe dar el ejemplo de respeto a los principios primordiales y fundamentales de la democracia: La autodeterminación del pueblo, el respeto y la promoción de los derechos humanos como el esfuerzo conjunto del cumplimiento de los objetivos de desarrollo sostenible de las naciones unidas. Así dejaremos de confundir la práctica de los valores cívicos y morales con un sistema político gobernante del momento. Porque cada persona se hará responsable de promover y asumir los valores en sus vidas y devolver la decencia a Panamá.