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Exhortación Apostólica Laudate Deum

 

Exhortación Apostólica

Laudate Deum

Del Santo Padre Francisco

A todas las personas de buena voluntad sobre la crisis climática

https://www.vatican.va/content/francesco/es/apost_exhortations/documents/20231004-laudate-deum.html

 

1. «Alaben a Dios por todas sus criaturas». Esta era la invitación que hacía san Francisco de Asís con su vida, con sus cánticos, con sus gestos. Así recogía la propuesta de los salmos de la Biblia y reproducía la sensibilidad de Jesús ante las criaturas de su Padre: «Miren los lirios del campo, cómo van creciendo sin fatigarse ni tejer. Yo les aseguro que ni Salomón, en el esplendor de su gloria, se vistió como uno de ellos» (Mt 6,28-29). «¿No se venden acaso cinco pájaros por dos monedas? Sin embargo, Dios no olvida a ninguno de ellos» (Lc 12,6). ¡Cómo no admirar esta ternura de Jesús ante todos los seres que nos acompañan en el camino!

2. Han pasado ya ocho años desde que publiqué la Carta encíclica Laudato si’, cuando quise compartir con todos ustedes, hermanas y hermanos de nuestro sufrido planeta, mis más sentidas preocupaciones sobre el cuidado de la casa común. Pero con el paso del tiempo advierto que no tenemos reacciones suficientes mientras el mundo que nos acoge se va desmoronando y quizás acercándose a un punto de quiebre. Más allá de esta posibilidad, es indudable que el impacto del cambio climático perjudicará de modo creciente las vidas y las familias de muchas personas. Sentiremos sus efectos en los ámbitos de la salud, las fuentes de trabajo, el acceso a los recursos, la vivienda, las migraciones forzadas, etc.

3. Es un problema social global que está íntimamente relacionado con la dignidad de la vida humana. Los obispos de Estados Unidos manifestaron muy bien el sentido social de nuestra preocupación por el cambio climático que va más allá de un planteo meramente ecológico, porque «nuestro cuidado mutuo y nuestro cuidado de la tierra están íntimamente unidos. El cambio climático es uno de los principales desafíos a los que se enfrentan la sociedad y la comunidad mundial. Los efectos del cambio climático son soportados por las personas más vulnerables, ya sea en casa o en todo el mundo». [1] En pocas palabras lo dijeron también los obispos en el Sínodo para la Amazonia: «Los atentados contra la naturaleza tienen consecuencias contra la vida de los pueblos». [2] Y para expresar de modo contundente que ya no se trata de una cuestión secundaria o ideológica sino de un drama que nos daña a todos, los obispos africanos afirmaron que el cambio climático pone de manifiesto «un impactante ejemplo de pecado estructural». [3]

4. La reflexión y la información que podemos recoger de estos últimos ocho años, nos permite precisar y completar lo que podíamos afirmar tiempo atrás. Por esta razón, y porque la situación se vuelve más imperiosa todavía, he querido compartir con ustedes estas páginas.


1. La crisis climática global

5. Por más que se pretendan negar, esconder, disimular o relativizar, los signos del cambio climático están ahí, cada vez más patentes. Nadie puede ignorar que en los últimos años hemos sido testigos de fenómenos extremos, períodos frecuentes de calor inusual, sequía y otros quejidos de la tierra que son sólo algunas expresiones palpables de una enfermedad silenciosa que nos afecta a todos. Es verdad que no cabe atribuir de modo habitual cada catástrofe concreta al cambio climático global. Sin embargo, sí es verificable que determinados cambios en el clima provocados por la humanidad aumentan notablemente la probabilidad de fenómenos extremos cada vez más frecuentes e intensos. Por eso sabemos que cada vez que aumente la temperatura global en 0,5 grados centígrados, aumentarán también la intensidad y la frecuencia de grandes lluvias y aluviones en algunas zonas, sequías severas en otras, calores extremos en ciertas regiones y grandes nevadas en otras. [4] Si hasta ahora podíamos tener olas de calor algunas veces al año, ¿qué pasaría con un aumento de la temperatura global de 1,5 grados centígrados, del cual estamos cerca? Esas olas de calor serán mucho más frecuentes y con mayor intensidad. Si llega a superar los 2 grados, se derretirían totalmente las capas de hielo de Groenlandia y de buena parte de la Antártida, [5] con enormes y gravísimas consecuencias para todos.

 

Resistencias y confusiones

6. En los últimos años no han faltado personas que pretendieron burlarse de esta constatación. Mencionan supuestos datos científicamente sólidos, como el hecho de que el planeta siempre tuvo y tendrá períodos de enfriamiento y de calentamiento. Olvidan mencionar otro dato relevante: que lo que estamos verificando ahora es una inusual aceleración del calentamiento, con una velocidad tal que basta una sola generación —no siglos ni milenios— para constatarlo. El aumento del nivel del mar y el derretimiento de los glaciares pueden ser fácilmente percibidos por una persona a lo largo de su vida, y probablemente en pocos años muchas poblaciones deberán trasladar sus hogares a causa de estos hechos.

7. Para ridiculizar a quienes hablan del calentamiento global, se acude al hecho de que suelen verificarse fríos también extremos. Se olvida que éste y otros síntomas extraordinarios no son más que diversas expresiones alternativas de la misma causa: el desajuste global que provoca el calentamiento del planeta. Tanto las sequías como las inundaciones, tanto los lagos que se secan como las poblaciones arrasadas por maremotos o desbordes, tienen en definitiva el mismo origen. Por otra parte, si hablamos de un fenómeno global no podemos confundirlo con eventos transitorios y cambiantes, que se explican en buena parte por factores locales.

8. La falta de información lleva a confundir las grandes proyecciones climáticas que suponen períodos largos —hablamos al menos de décadas— con las previsiones meteorológicas que a lo sumo pueden abarcar algunas semanas. Cuando hablamos del cambio climático nos referimos a una realidad global —con constantes variaciones locales— que persiste durante varias décadas.

9. Con la pretensión de simplificar la realidad, no faltan quienes responsabilizan a los pobres porque tienen muchos hijos y hasta pretenden resolverlo mutilando a las mujeres de países menos desarrollados. Como siempre, pareciera que la culpa es de los pobres. Pero la realidad es que un bajo porcentaje más rico del planeta contamina más que el 50% más pobre de toda la población mundial, y que la emisión per cápita de los países más ricos es muchas veces mayor que la de los más pobres. [6] ¿Cómo olvidar que África, que alberga más de la mitad de los más pobres del planeta, es responsable de una mínima parte de las emisiones históricas?

10. También suele decirse que los esfuerzos por mitigar el cambio climático, reduciendo el uso de combustibles fósiles y desarrollando formas de energía más limpias, provocará una reducción de los puestos de trabajo. Lo que ocurre es que millones de personas pierden su empleo debido a las diversas consecuencias del cambio climático: tanto el aumento del nivel del mar como las sequías y muchos otros fenómenos que afectan al planeta, han dejado a mucha gente a la deriva. Por otra parte, la transición hacia formas renovables de energía, bien gestionada, así como todos los esfuerzos de adaptación a los daños del cambio climático, son capaces de generar innumerables puestos de trabajo en diferentes sectores. Esto requiere que los políticos y empresarios estén ahora mismo ocupándose de ello.

 

Las causas humanas

11. Ya no se puede dudar del origen humano —“antrópico”— del cambio climático. Veamos por qué. La concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera, que por ese efecto provocan el calentamiento de la tierra, se mantuvo estable hasta el siglo XIX, por debajo de las 300 partes por millón en volumen. Pero a mediados de ese siglo, en coincidencia con el desarrollo industrial, comenzaron a crecer las emisiones. En los últimos cincuenta años el aumento se aceleró notablemente, como lo ha certificado el observatorio de Mauna Loa, que toma medidas diarias de dióxido de carbono desde el año 1958. Mientras escribía la Laudato si’ se alcanzó el máximo de la historia —400 partes por millón— hasta llegar en junio de 2023 a las 423 partes por millón. [7] Más del 42% del total de las emisiones netas a partir del año 1850 se produjeron después de 1990. [8]

12. Al mismo tiempo verificamos que en los últimos cincuenta años la temperatura aumentó con una velocidad inédita, sin precedentes en los últimos dos mil años. En este período la tendencia fue de un calentamiento de 0,15 grados centígrados por década, el doble de lo ocurrido en los últimos 150 años. Desde 1850 hasta hoy la temperatura global aumentó 1,1 grados centígrados, fenómeno que se amplifica en las áreas polares. A este ritmo, es posible que en diez años alcanzaremos el límite máximo global deseable de 1,5 grados centígrados. [9] El aumento no se dio sólo en la superficie terrestre, sino también en varios kilómetros hacia arriba en la atmósfera, en la superficie de los océanos y aun en profundidades por cientos de metros. Así se incrementó además la acidificación de los mares y se redujeron sus niveles de oxígeno. Los glaciares se retraen, disminuye la cobertura nevosa y sube constantemente el nivel del mar. [10]

13. No es posible ocultar la coincidencia de estos fenómenos climáticos globales con el crecimiento acelerado de la emisión de gases de efecto invernadero sobre todo desde mediados del siglo XX. Una abrumadora mayoría de científicos especializados en clima sostienen esta correlación y sólo un ínfimo porcentaje de ellos intenta negar esta evidencia. Lamentablemente la crisis climática no es precisamente un asunto que interese a los grandes poderes económicos, preocupados por el mayor rédito posible con el menor costo y en el tiempo más corto que se pueda.

14. Me veo obligado a hacer estas precisiones, que pueden parecer obvias, debido a ciertas opiniones despectivas y poco racionales que encuentro incluso dentro de la Iglesia católica. Pero ya no podemos dudar de que la razón de la inusual velocidad de estos peligrosos cambios es un hecho inocultable: las enormes novedades que tienen que ver con la desbocada intervención humana sobre la naturaleza en los dos últimos siglos. Los elementos de origen natural que suelen provocar calentamiento, como las erupciones volcánicas y otros, son insuficientes para explicar la proporción y la velocidad de los cambios de las últimas décadas. [11] La evolución de las temperaturas medias superficiales no se sostiene sin el efecto del aumento de los gases de efecto invernadero.

 

Daños y riesgos

15. Algunas manifestaciones de esta crisis climática ya son irreversibles al menos por cientos de años, como el aumento de la temperatura global de los océanos, su acidificación y disminución de oxígeno. Las aguas oceánicas tienen una inercia térmica y se requieren siglos para normalizar la temperatura y la salinidad, lo cual afecta la supervivencia de muchas especies. Este es un signo entre tantos otros de que las demás criaturas de este mundo han dejado de ser compañeros de camino para convertirse en nuestras víctimas.

16. Lo mismo hay que decir del proceso que lleva a la disminución del hielo continental. El derretimiento de los polos no podrá revertirse por cientos de años. En lo que respecta al clima, hay factores que siguen adelante durante mucho tiempo, independientemente de los hechos que los hayan desencadenado. Por esta razón, ya no podemos detener el enorme daño que hemos causado. Sólo estamos a tiempo para evitar daños todavía más dramáticos.

17. Ciertos diagnósticos apocalípticos suelen parecer poco racionales o insuficientemente fundados. Esto no debería llevarnos a ignorar que la posibilidad de llegar a un punto crítico es real. Pequeños cambios pueden provocar cambios mayores, imprevistos y quizás ya irreversibles, debido a los factores de inercia. Así se terminaría desencadenando una cascada de acontecimientos que se precipiten como una bola de nieve. En un caso así siempre se llegará tarde, porque ninguna intervención podrá detener el proceso ya iniciado. De allí no se regresa. No podemos afirmar con certeza que en las condiciones actuales esto vaya a suceder. Sí es seguro que no deja de ser una posibilidad si tenemos en cuenta fenómenos ya en curso que “sensibilizan” al clima, como la disminución de los hielos, las modificaciones de flujos oceánicos, la deforestación en las selvas tropicales, el derretimiento del permafrost en Rusia, etc. [12]

18. Por consiguiente, urge una mirada más amplia que nos permita no sólo admirarnos por las maravillas del progreso, sino también es apremiante prestar atención a otros efectos que probablemente ni siquiera podían imaginarse un siglo atrás. Se nos pide nada más que algo de responsabilidad ante la herencia que dejaremos tras nuestro paso por este mundo.

19. Finalmente podemos agregar que la pandemia del covid-19 ha constatado la estrecha relación de la vida humana con la de otros seres vivientes y con el medio ambiente. Pero en especial ha confirmado que lo que ocurre en cualquier lugar del mundo tiene repercusiones en todo el planeta. Esto me permite repetir dos convicciones en las cuales insisto hasta el cansancio: “todo está conectado” y “nadie se salva solo”.

 

2. Más paradigma tecnocrático

20. En Laudato si’ ofrecí un breve desarrollo acerca del paradigma tecnocrático que está detrás del proceso actual de degradación del ambiente. Es «un modo de entender la vida y la acción humana que se ha desviado y que contradice la realidad hasta dañarla». [13] En el fondo consiste en pensar «como si la realidad, el bien y la verdad brotaran espontáneamente del mismo poder tecnológico y económico». [14] Como lógica consecuencia, «de aquí se pasa fácilmente a la idea de un crecimiento infinito o ilimitado, que ha entusiasmado tanto a economistas, financistas y tecnólogos». [15]

21. Durante los últimos años hemos podido confirmar este diagnóstico al mismo tiempo que hemos asistido a un nuevo avance de dicho paradigma. La inteligencia artificial y las últimas novedades tecnológicas parten de la idea de un ser humano sin límite alguno, cuyas capacidades y posibilidades podrían ser ampliadas hasta el infinito gracias a la tecnología. Así, el paradigma tecnocrático se retroalimenta monstruosamente.

22. Sin duda no son ilimitados los recursos naturales que requiere la tecnología, como el litio, el silicio y tantos otros, pero el mayor problema es la ideología que subyace a una obsesión: acrecentar el poder humano más allá de lo imaginable, frente al cual la realidad no humana es un mero recurso a su servicio. Todo lo que existe deja de ser un don que se agradece, se valora y se cuida, y se convierte en un esclavo, en víctima de cualquier capricho de la mente humana y sus capacidades.

23. Provoca escalofríos advertir que las capacidades ampliadas por la tecnología «dan a quienes tienen el conocimiento, y sobre todo el poder económico para utilizarlo, un dominio impresionante sobre el conjunto de la humanidad y del mundo entero. Nunca la humanidad tuvo tanto poder sobre sí misma y nada garantiza que vaya a utilizarlo bien, sobre todo si se considera el modo como lo está haciendo […]. ¿En manos de quiénes está y puede llegar a estar tanto poder? Es tremendamente riesgoso que resida en una pequeña parte de la humanidad». [16]

 

Repensar nuestro uso del poder

24. No todo aumento de poder es un progreso para la humanidad. Basta pensar en las tecnologías “admirables” que fueron utilizadas para diezmar poblaciones, lanzar bombas atómicas, aniquilar etnias. Fueron momentos históricos donde la admiración ante el progreso no dejaba ver lo horroroso de sus efectos. Pero este riesgo está siempre presente, porque «el inmenso crecimiento tecnológico no estuvo acompañado de un desarrollo del ser humano en responsabilidad, valores, conciencia […]. Está desnudo y expuesto frente a su propio poder, que sigue creciendo, sin tener los elementos para controlarlo. Puede disponer de mecanismos superficiales, pero podemos sostener que le falta una ética sólida, una cultura y una espiritualidad que realmente lo limiten y lo contengan en una lúcida abnegación». [17] No es extraño que un poder tan grande en semejantes manos sea capaz de arrasar con la vida, mientras la matriz de pensamiento propia del paradigma tecnocrático nos enceguece y no nos permite advertir este gravísimo problema de la humanidad actual.

25. En contra de este paradigma tecnocrático decimos que el mundo que nos rodea no es un objeto de aprovechamiento, de uso desenfrenado, de ambición ilimitada. Ni siquiera podemos decir que la naturaleza es un mero “marco” donde desarrollamos nuestra vida y nuestros proyectos, porque «estamos incluidos en ella, somos parte de ella y estamos interpenetrados», [18] de manera que «el mundo no se contempla desde fuera sino desde dentro». [19]

26. Esto mismo excluye la idea de que el ser humano sea un extraño, un factor externo sólo capaz de dañar el ambiente. Debe ser considerado como parte de la naturaleza. La vida humana, la inteligencia y la libertad integran la naturaleza que enriquece a nuestro planeta y son parte de sus fuerzas internas y de su equilibrio.

27. Por eso un ambiente sano también es producto de la interacción del ser humano con el ambiente, como ocurre en las culturas indígenas y como ha ocurrido durante siglos en distintas regiones de la tierra. Los grupos humanos muchas veces han “creado” ambiente, [20] lo han remodelado de alguna manera sin destruirlo ni ponerlo en peligro. El gran problema actual es que el paradigma tecnocrático ha destrozado esta sana y armónica relación. De todos modos, la indispensable superación de ese paradigma tan dañino y destructivo no se encontrará en una negación del ser humano, sino que incluye la interacción de los sistemas naturales «con los sistemas sociales». [21]

28. Necesitamos repensar entre todos la cuestión del poder humano, cuál es su sentido, cuáles son sus límites. Porque nuestro poder ha aumentado frenéticamente en pocas décadas. Hemos hecho impresionantes y asombrosos progresos tecnológicos, y no advertimos que al mismo tiempo nos convertimos en seres altamente peligrosos, capaces de poner en riesgo la vida de muchos seres y nuestra propia supervivencia. Cabe repetir hoy la ironía de Soloviev: «Un siglo tan avanzado que era también el último». [22] Hace falta lucidez y honestidad para reconocer a tiempo que nuestro poder y el progreso que generamos se vuelven contra nosotros mismos. [23]

 

 

El aguijón ético

29. La decadencia ética del poder real se disfraza gracias al marketing y la información falsa, mecanismos útiles en manos de quienes tienen mayores recursos para incidir en la opinión pública a través de ellos. Con la ayuda de estos mecanismos, cuando se piensa iniciar un emprendimiento con fuerte intervención sobre el ambiente y altos efectos contaminantes, se ilusiona a los pobladores de la zona hablando del progreso local que podrá generarse o de las posibilidades económicas, laborales y de promoción humana que esto significará para sus hijos. Pero en realidad no parece interesarles de verdad el futuro de estas personas, porque no se les dice con claridad que detrás de ese emprendimiento quedarían una tierra arrasada; unas condiciones mucho más desfavorables para vivir y prosperar; una región desolada, menos habitable, sin vida y sin la alegría de la convivencia y de la esperanza; además del daño global que termina perjudicando a muchos más.

30. Basta pensar en el efímero entusiasmo del dinero que se recibió a cambio de depositar en un lugar residuos nucleares. La casa que se pudo comprar con ese dinero se convirtió en una tumba a causa de las enfermedades que se desencadenaron. Y no hablo movido por una imaginación desbordada sino a partir de algo que hemos vivido. Podría decirse que se trata de un ejemplo extremo, pero no cabe hablar aquí de daños “menores”, porque es precisamente la sumatoria de muchos daños que se consideran tolerables lo que termina llevándonos a la situación en la que ahora nos encontramos.

31. Esta situación no tiene que ver sólo con la física o la biología, sino también con la economía y nuestro modo de concebirla. La lógica del máximo beneficio con el menor costo, disfrazada de racionalidad, de progreso y de promesas ilusorias, vuelve imposible cualquier sincera preocupación por la casa común y cualquier inquietud por promover a los descartados de la sociedad. En los últimos años podemos advertir que, aturdidos y extasiados frente a las promesas de tantos falsos profetas, a veces los mismos pobres caen en el engaño de un mundo que no se construye para ellos.

32. Se desarrollan planteos equivocados en torno a la llamada “meritocracia”, convertida en un “merecido” poder humano al que todo debe someterse, en un dominio de los que nacieron con mejores condiciones de desarrollo. Una cosa es un sano planteo sobre el valor del esfuerzo, el desarrollo de las propias capacidades y un loable espíritu de iniciativa, pero si no se busca una real igualdad de oportunidades esto se convierte fácilmente en una pantalla que consolida más aún los privilegios de unos pocos con mayor poder. Dentro de esta lógica perversa, ¿qué les importa el daño a la casa común si ellos se sienten seguros bajo la supuesta armadura de los recursos económicos que han conseguido con su capacidad y con su esfuerzo?

33. En la propia conciencia, y ante el rostro de los hijos que pagarán el daño de sus acciones, aparece la pregunta por el sentido: ¿qué sentido tiene mi vida, qué sentido tiene mi paso por esta tierra, qué sentido tienen, en definitiva, mi trabajo y mi esfuerzo?

 

3. La debilidad de la política internacional

34. Si bien «la historia da muestras de estar volviendo atrás […] cada generación ha de hacer suyas las luchas y los logros de las generaciones pasadas y llevarlas a metas más altas aún. Es el camino. El bien, como también el amor, la justicia y la solidaridad, no se alcanzan de una vez para siempre; han de ser conquistados cada día». [24] Para que haya avances sólidos y duraderos, me permito insistir que «deben ser favorecidos los acuerdos multilaterales entre los Estados». [25]

35. No es conveniente confundir el multilateralismo con una autoridad mundial concentrada en una persona o en una élite con excesivo poder: «Cuando se habla de la posibilidad de alguna forma de autoridad mundial regulada por el derecho no necesariamente debe pensarse en una autoridad personal». [26] Hablemos sobre todo de «organizaciones mundiales más eficaces, dotadas de autoridad para asegurar el bien común mundial, la erradicación del hambre y la miseria, y la defensa cierta de los derechos humanos elementales». [27] La cuestión es que deben estar dotadas de autoridad real de manera que se pueda “asegurar” el cumplimiento de algunos objetivos irrenunciables. De este modo se daría lugar a un multilateralismo que no dependa de las circunstancias políticas cambiantes o de los intereses de unos pocos y que tenga una eficacia estable.

36. Sigue siendo lamentable que las crisis mundiales sean desaprovechadas cuando serían la ocasión para provocar cambios saludables. [28] Es lo que ocurrió en la crisis financiera de 2007-2008 y ha vuelto a ocurrir en la crisis del covid-19. Porque «las verdaderas estrategias que se desarrollaron posteriormente en el mundo se orientaron a más individualismo, a más desintegración, a más libertad para los verdaderos poderosos que siempre encuentran la manera de salir indemnes». [29]

 

Reconfigurar el multilateralismo

37. Más que salvar el viejo multilateralismo, parece que el desafío actual está en reconfigurarlo y recrearlo teniendo en cuenta la nueva situación mundial. Los invito a reconocer que «tantas agrupaciones y organizaciones de la sociedad civil ayudan a paliar las debilidades de la Comunidad internacional, su falta de coordinación en situaciones complejas, su falta de atención frente a derechos humanos». [30] Por ejemplo, el proceso de Ottawa contra el uso, producción y manufactura de las minas antipersonales es un ejemplo que muestra cómo la sociedad civil con sus organizaciones es capaz de crear dinámicas eficientes que las Naciones Unidas no logran. De este modo, se aplica el principio de subsidiariedad también a la relación mundial-local.

38. A mediano plazo, la globalización favorece intercambios culturales espontáneos, mayor conocimiento mutuo y caminos de integración de las poblaciones que terminen provocando un multilateralismo “desde abajo” y no simplemente decidido por las élites del poder. Las exigencias que brotan desde abajo en todo el mundo, donde luchadores de los más diversos países se ayudan y se acompañan, pueden terminar presionando a los factores de poder. Es de esperar que esto ocurra con respecto a la crisis climática. Por eso reitero que «si los ciudadanos no controlan al poder político —nacional, regional y municipal—, tampoco es posible un control de los daños ambientales». [31]

39. La cultura posmoderna generó una nueva sensibilidad hacia los que son más débiles y menos dotados de poder. Esto se conecta con mi insistencia en la Carta encíclica Fratelli tutti sobre el primado de la persona humana y la defensa de su dignidad más allá de toda circunstancia. Es otro modo de invitar al multilateralismo en orden a resolver los problemas reales de la humanidad, procurando ante todo el respeto a la dignidad de las personas de manera que la ética prime por sobre las conveniencias locales o circunstanciales.

40. No se trata de reemplazar a la política, porque por otro lado las potencias emergentes se vuelven cada vez más relevantes y de hecho son capaces de obtener resultados importantes en la resolución de problemas concretos, como algunas de ellas han demostrado en la pandemia. Precisamente el hecho de que las respuestas a los problemas puedan venir de cualquier país, aunque sea pequeño, termina presentando al multilateralismo como un camino inevitable.

41. La vieja diplomacia, también en crisis, sigue mostrando su importancia y su necesidad. Todavía no ha logrado generar un modelo de diplomacia multilateral que responda a la nueva configuración del mundo, pero, si sabe reconfigurarse, debe ser parte de la solución, porque la experiencia de siglos tampoco puede ser desechada.

42. El mundo se vuelve tan multipolar y a la vez tan complejo que se requiere un marco diferente de cooperación efectiva. No basta pensar en los equilibrios de poder sino también en la necesidad de dar respuesta a los nuevos desafíos y de reaccionar con mecanismos globales ante los retos ambientales, sanitarios, culturales y sociales, especialmente para consolidar el respeto a los derechos humanos más elementales, a los derechos sociales y al cuidado de la casa común. Se trata de establecer reglas globales y eficientes que permitan “asegurar” esta tutela mundial.

43. Todo esto supone generar un nuevo procedimiento de toma de decisiones y de legitimación de esas decisiones, porque el establecido varias décadas atrás no es suficiente ni parece eficaz. En este marco necesariamente se requieren espacios de conversación, de consulta, de arbitraje, de resolución de conflictos y de supervisión, y en definitiva una suerte de mayor “democratización” en el ámbito global para que se expresen e incorporen las variadas situaciones. Ya no nos servirá sostener instituciones para preservar los derechos de los más fuertes sin cuidar los de todos.

 

4. Las conferencias sobre el clima: avances y fracasos

44. Desde hace décadas, representantes de más de 190 países se reúnen periódicamente para tratar la cuestión climática. La Conferencia de Río de Janeiro de 1992 llevó a la adopción de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), un tratado que entró en vigor cuando se alcanzaron las necesarias ratificaciones de los países firmantes en 1994. Estos Estados se reúnen cada año en la Conferencia de las Partes (COP), máximo organismo para la toma de decisiones. Algunas fueron fracasos, como la de Copenhague (2009), mientras otras permitieron dar pasos importantes, como la COP3 de Kyoto (1997). Su valioso Protocolo es el que puso como objetivo reducir las emisiones complexivas de gases de efecto invernadero un 5% con respecto a 1990. El plazo era el año 2012, pero evidentemente no se cumplió.

45. Todas las partes se comprometían además a implementar programas de adaptación para reducir los efectos del cambio climático ya en curso. Se preveía también una ayuda para cubrir los costos de estas medidas en los países en vías de desarrollo. El Protocolo en realidad entró en vigor en 2005.

46. Posteriormente se propuso un mecanismo relativo a las pérdidas y los daños (loss and damage) causados por el cambio climático, que reconoce como principales responsables a los países más ricos y procura compensar los daños y las pérdidas que el cambio climático produce en los países más vulnerables. No se trata ya de financiar la “adaptación” de estos países sino de compensarlos por los daños ya sufridos. Esta cuestión fue objeto de importantes discusiones en varias COP.

47. La COP21 de París (2015) fue otro momento significativo, porque generó un acuerdo que involucró a todos. Puede considerarse un nuevo comienzo, teniendo en cuenta el incumplimiento de los objetivos planteados en la etapa anterior. El acuerdo entró en vigor el 4 de noviembre de 2016. Si bien es un acuerdo vinculante, no todas las prescripciones son obligaciones en sentido estricto y algunas de ellas dan lugar a una amplia discrecionalidad. Por otra parte, aun para las obligaciones incumplidas no se prevén estrictamente sanciones ni hay instrumentos eficaces para garantizar su cumplimiento. Prevé también formas de flexibilidad para países en vías de desarrollo.

48. El Acuerdo de París presenta un gran objetivo a largo plazo: mantener el aumento de las temperaturas medias globales por debajo de los 2 grados con respecto a los niveles preindustriales, intentando aun bajar a los 1,5 grados. Todavía se está trabajando para consolidar prácticas concretas de monitorización y facilitar criterios generales que permitan comparar los objetivos de los distintos países. Esto dificulta una valoración más objetiva (cuantitativa) de los resultados reales.

49. Después de algunas Conferencias con escasos resultados, y la decepción de la COP25 de Madrid (2019), se esperaba revertir esta inercia en la COP26 de Glasgow (2021). Básicamente, su resultado fue relanzar el Acuerdo de París puesto en duda por los condicionamientos y efectos de la pandemia. Por lo demás, abundaron las “exhortaciones” cuya incidencia real era poco previsible. Las propuestas tendientes a asegurar una transición rápida y efectiva hacia formas alternativas de energía menos contaminantes no pudieron avanzar.

50. La COP27 de Sharm El Sheikh (2022) estuvo desde el inicio amenazada por la situación que creó la invasión a Ucrania, que causó una importante crisis económica y energética. El uso del carbón aumentó y todos querían asegurarse su abastecimiento. Los países en vías de desarrollo consideraban una prioridad urgente acceder a la energía y a las posibilidades de desarrollo. Hubo un claro sinceramiento al reconocer que de hecho los combustibles fósiles proveen todavía el 80% de la energía mundial y que su uso sigue en aumento.

51. Esta Conferencia egipcia fue un ejemplo más de la dificultad de las negociaciones. Podría decirse que produjo al menos un avance en la consolidación del sistema de financiación por “las pérdidas y los daños” en los países más afectados por los desastres climáticos. Esto parecía dar nueva voz y mayor participación a los países en vías de desarrollo. Pero aun en esta cuestión muchos puntos quedaron imprecisos, sobre todo la responsabilidad concreta de los países que deben aportar.

52. Hoy podemos seguir afirmando que «los acuerdos han tenido un bajo nivel de implementación porque no se establecieron adecuados mecanismos de control, de revisión periódica y de sanción de los incumplimientos. Los principios enunciados siguen reclamando caminos eficaces y ágiles de ejecución práctica». [32] También que «las negociaciones internacionales no pueden avanzar significativamente por las posiciones de los países que privilegian sus intereses nacionales sobre el bien común global. Quienes sufrirán las consecuencias que nosotros intentamos disimular recordarán esta falta de conciencia y de responsabilidad». [33]

 

5. ¿Qué se espera de la COP28 de Dubai?

53. Los Emiratos Árabes Unidos hospedarán la próxima Conferencia de las Partes (COP28). Es un país del Golfo Pérsico que se caracteriza por ser un gran exportador de energías fósiles, si bien ha hecho importantes inversiones en energías renovables. Mientras tanto, las empresas de gas y petróleo ambicionan nuevos proyectos allí para ampliar más aún la producción. Decir que no hay nada que esperar sería un acto suicida, porque implicaría exponer a toda la humanidad, especialmente a los más pobres, a los peores impactos del cambio climático.

54. Si confiamos en la capacidad del ser humano de trascender sus pequeños intereses y de pensar en grande, no podemos dejar de soñar que esta COP28 dé lugar a una marcada aceleración de la transición energética, con compromisos efectivos y susceptibles de un monitoreo permanente. Esta Convención puede ser un punto de inflexión, que muestre que todo lo que se ha hecho desde 1992 iba en serio y valió la pena, o será una gran decepción y pondrá en riesgo lo bueno que se haya podido lograr hasta ahora.

55. A pesar de tantas negociaciones y acuerdos, las emisiones globales siguieron creciendo. Es verdad que se puede afirmar que sin estos acuerdos habrían crecido todavía más. Pero en otros temas relacionados con el medio ambiente, cuando hubo voluntad, se obtuvieron resultados muy significativos, como ocurrió con la protección de la capa de ozono. En cambio, la transición que se necesita, hacia energías limpias como la eólica y la solar, abandonando los combustibles fósiles, no tiene la velocidad necesaria. Por consiguiente, lo que se está haciendo corre el riesgo de interpretarse sólo como un juego para distraer.

56. Necesitamos superar la lógica de aparecer como seres sensibles y al mismo tiempo no tener la valentía de producir cambios sustanciales. Sabemos que, a este ritmo, sólo en pocos años superaremos el límite máximo deseable de 1,5 grados centígrados y en poco tiempo más podríamos llegar a los 3 grados, con un alto riesgo de alcanzar un punto crítico. Aunque no se llegara a este punto de no retorno, lo cierto es que las consecuencias serían desastrosas y deberían tomarse medidas de modo precipitado, con costos enormes y con gravísimas e intolerables consecuencias económicas y sociales. Si las medidas que tomemos ahora tienen costos, estos serán muchos más pesados mientras más esperemos.

57. Considero imprescindible insistir en que «buscar sólo un remedio técnico a cada problema ambiental que surja es aislar cosas que en la realidad están entrelazadas y esconder los verdaderos y más profundos problemas del sistema mundial». [34] Es verdad que son necesarios los esfuerzos de adaptación frente a los males que son irreversibles en el corto plazo. También son positivas algunas intervenciones y avances tecnológicos que permitan absorber o capturar los gases emitidos. Pero corremos el riesgo de quedarnos encerrados en la lógica de emparchar, colocar remiendos, atar con alambre, mientras por lo bajo avanza un proceso de deterioro que continuamos alimentando. Suponer que cualquier problema futuro podrá ser resuelto con nuevas intervenciones técnicas es un pragmatismo homicida, como patear hacia adelante una bola de nieve.

58. Terminemos de una vez con las burlas irresponsables que presentan este tema como algo sólo ambiental, “verde”, romántico, frecuentemente ridiculizado por los intereses económicos. Aceptemos finalmente que es un problema humano y social en un variado arco de sentidos. Por eso se requiere un acompañamiento de todos. Suelen llamar la atención en las Conferencias sobre el clima las acciones de grupos que son criticados como “radicalizados”. Pero en realidad ellos cubren un vacío de la sociedad entera, que debería ejercer una sana “presión”, porque a cada familia le corresponde pensar que está en juego el futuro de sus hijos.

59. Si hay un interés sincero en lograr que la COP28 sea histórica, que nos honre y ennoblezca como seres humanos, entonces sólo cabe esperar formas vinculantes de transición energética que tengan tres características: que sean eficientes, que sean obligatorias y que se puedan monitorear fácilmente. Esto para lograr que se inicie un nuevo proceso destacado por tres aspectos: que sea drástico, que sea intenso y que cuente con el compromiso de todos. No es lo que ocurrió en el camino recorrido hasta ahora, y sólo con ese proceso se podría recuperar la credibilidad de la política internacional, porque únicamente de esa manera concreta será posible reducir notablemente el dióxido de carbono y evitar a tiempo los peores males.

60. Ojalá quienes intervengan puedan ser estrategas capaces de pensar en el bien común y en el futuro de sus hijos, más que en intereses circunstanciales de algunos países o empresas. Ojalá muestren así la nobleza de la política y no su vergüenza. A los poderosos me atrevo a repetirles esta pregunta: «¿Para qué se quiere preservar hoy un poder que será recordado por su incapacidad de intervenir cuando era urgente y necesario hacerlo?». [35]

 

 

6. Las motivaciones espirituales

61. A los fieles católicos no quiero dejar de recordarles las motivaciones que brotan de la propia fe. Aliento a los hermanos y hermanas de otras religiones a que hagan lo mismo, porque sabemos que la fe auténtica no sólo da fuerzas al corazón humano, sino que transforma la vida entera, transfigura los propios objetivos, ilumina la relación con los demás y los lazos con todo lo creado.

 

A la luz de la fe

62. La Biblia narra que «Dios miró todo lo que había hecho, y vio que era muy bueno» ( Gn 1,31). De Él es «la tierra y todo lo que hay en ella» ( Dt 10,14). Por eso Él nos dice: «La tierra no podrá venderse definitivamente, porque la tierra es mía, y ustedes son para mí como extranjeros y huéspedes» ( Lv 25,23). Entonces, «esta responsabilidad ante una tierra que es de Dios implica que el ser humano, dotado de inteligencia, respete las leyes de la naturaleza y los delicados equilibrios entre los seres de este mundo». [36]

63. Por otra parte, «el conjunto del universo, con sus múltiples relaciones, muestra mejor la inagotable riqueza de Dios». Por consiguiente, para ser sabios, «necesitamos captar la variedad de las cosas en sus múltiples relaciones». [37] En este camino de sabiduría, no es irrelevante para nosotros que desaparezcan tantas especies, que la crisis climática ponga en riesgo la vida de tantos seres.

64. Jesús «podía invitar a otros a estar atentos a la belleza que hay en el mundo porque él mismo estaba en contacto permanente con la naturaleza y le prestaba una atención llena de cariño y asombro. Cuando recorría cada rincón de su tierra se detenía a contemplar la hermosura sembrada por su Padre, e invitaba a sus discípulos a reconocer en las cosas un mensaje divino». [38]

65. Al mismo tiempo, «las criaturas de este mundo ya no se nos presentan como una realidad meramente natural, porque el Resucitado las envuelve misteriosamente y las orienta a un destino de plenitud. Las mismas flores del campo y las aves que él contempló admirado con sus ojos humanos, ahora están llenas de su presencia luminosa». [39] Si «el universo se desarrolla en Dios, que lo llena todo, entonces hay mística en una hoja, en un camino, en el rocío, en el rostro del pobre». [40] El mundo canta un Amor infinito, ¿cómo no cuidarlo?

Caminar en comunión y compromiso

66. Dios nos ha unido a todas sus criaturas. Sin embargo, el paradigma tecnocrático nos puede aislar del mundo que nos rodea, y nos engaña haciéndonos olvidar que todo el mundo es una “zona de contacto”. [41]

67. La cosmovisión judeocristiana defiende el valor peculiar y central del ser humano en medio del concierto maravilloso de todos los seres, pero hoy nos vemos obligados a reconocer que sólo es posible sostener un “antropocentrismo situado”. Es decir, reconocer que la vida humana es incomprensible e insostenible sin las demás criaturas, porque «todos los seres del universo estamos unidos por lazos invisibles y conformamos una especie de familia universal, una sublime comunión que nos mueve a un respeto sagrado, cariñoso y humilde». [42]

68. Esto no es producto de nuestra voluntad, tiene otro origen que está en la raíz de nuestro ser, ya que «Dios nos ha unido tan estrechamente al mundo que nos rodea, que la desertificación del suelo es como una enfermedad para cada uno, y podemos lamentar la extinción de una especie como si fuera una mutilación». [43] Así terminamos con la idea de un ser humano autónomo, todopoderoso, ilimitado, y nos repensamos a nosotros mismos para entendernos de una manera más humilde y más rica.

69. Invito a cada uno a acompañar este camino de reconciliación con el mundo que nos alberga, y a embellecerlo con el propio aporte, porque ese empeño propio tiene que ver con la dignidad personal y con los grandes valores. Sin embargo, no puedo negar que es necesario ser sinceros y reconocer que las soluciones más efectivas no vendrán sólo de esfuerzos individuales sino ante todo de las grandes decisiones en la política nacional e internacional.

70. No obstante, todo suma, y evitar entre todos un aumento de una décima de grado en la temperatura global ya puede ser suficiente para evitar algunos sufrimientos a muchas personas. Pero lo que importa es algo menos cuantitativo: recordar que no hay cambios duraderos sin cambios culturales, sin una maduración en la forma de vida y en las convicciones de las sociedades, y no hay cambios culturales sin cambios en las personas.

71. El esfuerzo de los hogares por contaminar menos, reducir los desperdicios, consumir con prudencia, va creando una nueva cultura. Este solo hecho de modificar los hábitos personales, familiares y comunitarios alimenta la preocupación frente a las responsabilidades incumplidas de los sectores políticos y la indignación ante el desinterés de los poderosos. Advirtamos entonces que, aun cuando esto no produce de inmediato un efecto muy notable desde el punto de vista cuantitativo, sí colabora para gestar grandes procesos de transformación que operan desde las profundidades de la sociedad.

72. Si consideramos que las emisiones per cápita en Estados Unidos son alrededor del doble de las de un habitante de China y cerca de siete veces más respecto a la media de los países más pobres, [44] podemos afirmar que un cambio generalizado en el estilo de vida irresponsable ligado al modelo occidental tendría un impacto significativo a largo plazo. Así, junto con las indispensables decisiones políticas, estaríamos en la senda del cuidado mutuo.

73. «Alaben a Dios» es el nombre de esta carta. Porque un ser humano que pretende ocupar el lugar de Dios se convierte en el peor peligro para sí mismo.

 

Dado en Roma, en la Basílica de San Juan de Letrán, el 4 de octubre, Fiesta de san Francisco de Asís, del año 2023, décimo primero de mi Pontificado.

 

FRANCISCO

 


[1] Conferencia de los Obispos Católicos de Estados Unidos, Global Climate Change Background, 2019.

[2] Asamblea Especial del Sínodo de los Obispos para la Región Panamazónica, Documento final, octubre 2019, 10: AAS 111 (2019), 1744.

[3] Simposio de las Conferencias Episcopales de África y Madagascar (Sceam), African climate dialogues communiqué, Nairobi, 17 octubre 2022.

[4] Cf. Intergovernmental Panel on Climate Change (IPCC), Climate Change 2021, The Physical Science Basis, Cambridge and New York 2021, B.2.2.

[5] Cf. Íd., Climate Change 2023Synthesis Report, Summary for Policymakers, B.3.2. Para el Informe 2023 se hace referencia a https://www.ipcc.ch/report/ar6/syr/downloads/report/IPCC_AR6_SYR_SPM.pdf.

[6] Cf. United Nations Environment Program, The Emissions Gap Report 2022: https://www.unep.org/resources/emissions-gap-report-2022.

[7] Cf. Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica, Earth System Research LaboratoriesGlobal Monitoring Laboratory, “Trends in Atmospheric Carbon Dioxide”: https://www.gml.noaa.gov/ccgg/trends/

[8] Cf. IPCC, Climate Change 2023Synthesis Report, Summary for Policymakers, A.1.3.

[9] Cf. ibíd., B.5.3.

[10] Estos datos del Intergovernmental Panel on Climate Change se basan en aproximadamente 34.000 estudios; cf. IPCC, Synthesis Report of the Sixth Assessment Report (20/03/2023): AR6 Synthesis Report: Climate Change 2023.

[11] Cf. IPCC, Climate Change 2023Synthesis Report, Summary for Policymakers, A.1.2.

[12] Cf. ibíd.

[13] Carta enc. Laudato si’ (24 mayo 2015), 101: AAS 107 (2015), 887.

[14] Ibíd., 105: AAS 107 (2015), 889.

[15] Ibíd., 106: AAS 107 (2015), 890.

[16] Ibíd., 104: AAS 107 (2015), 888-889.

[17] Ibíd., 105: AAS 107 (2015), 889.

[18] Ibíd., 139: AAS 107 (2015), 903.

[19] Ibíd ., 220: AAS 107 (2015), 934.

[20] Cf. S. Sörlin – P. Warde, “Making the Environment Historical. An Introduction”, en Íd., Nature’s End: History and the Environment, Basingstoke – New York 2009, 1-23.

[21] Carta enc. Laudato si’ (24 mayo 2015), 139: AAS 107 (2015), 903.

[22] V. Soloviev, Los tres diálogos y el relato del anticristo, Madrid 2016, 195.

[23] Cf. S. Pablo VI, Discurso a la FAO en su 25ᵒ aniversario (16 noviembre 1970), 4: AAS 62 (1970), 833.

[24] Carta enc. Fratelli tutti (3 octubre 2020), 11: AAS 112 (2020), 972.

[25] Ibíd ., 174: AAS 112 (2020), 1030.

[26] Ibíd ., 172: AAS 112 (2020), 1029.

[27] Ibíd .

[28] Cf. ibíd., 170: AAS 112 (2020), 1029.

[29] Ibíd.

[30] Ibíd., 175: AAS 112 (2020), 1031.

[31] Carta enc. Laudato si’ (24 mayo 2015), 179: AAS 107 (2015), 918.

[32] Ibíd., 167: AAS 107 (2015), 914.

[33] Ibíd., 169: AAS 107 (2015), 915.

[34] Ibíd., 111: AAS 107 (2015), 982.

[35] Ibíd., 57: AAS 107 (2015), 870.

[36] Ibíd., 68: AAS 107 (2015), 874.

[37] Ibíd., 86: AAS 107 (2015), 881.

[38] Ibíd., 97: AAS 107 (2015), 886.

[39] Ibíd., 100: AAS 107 (2015), 887.

[40] Ibíd ., 223: AAS 107 (2015), 938.

[41] Cf. D.J. Haraway, When Species Meet, Minneapolis 2008, pp. 205-249.

[42] Carta enc. Laudato si’ (24 mayo 2015), 89: AAS 107 (2015), 883.

[43] Exhort. ap. Evangelii gaudium (24 noviembre 2013), 215: AAS 105 (2013), 1109.

[44] Cf. United Nations Environment Program, Emission Gap Report 2022: https://www.unep.org/resources/emissions-gap-report-2022.

 

 

Apuntes cronológicos sobre Vasco Núñez de Balboa

 Por Olmedo Beluche 


Ofrezco estos apuntes para ayudar a la comprensión histórica del acontecimiento del cual se conmemorarán pronto los 500 años, el "avistamiento" o "descubrimiento" para los europeos del Mar del Sur (océano Pacífico) y del hombre que fue su principal protagonista. De Vasco Núñez de Balboa hay varias biografías muy buenas, aunque aquí me he basado en la de Charles Anderson. También muchos historiadores reputados y cientistas sociales han analizado las implicaciones del suceso para la historia humana. Esta cronología apenas pretende ser un esquema que ayude a captar al hecho y al hombre en perspectiva. Advierto que es muy probable que haya incurrido en omisiones importantes, pero inconscientes. 

 1475. Nace en Jerez de los Caballeros, Extremadura. Sin embargo, todos los historiadores señalan que no hay datos fehacientes sobre su infancia y nacimiento. Fecha de nacimiento se establece, según Anderson, a partir de afirmación de Las Casas de que, en 1510, cuando huyó de La Española, tenía 35 años de edad. Según Anderson los primeros cronistas (P. Mártir, Oviedo, Las Casas y Gomara) atribuyen lugar de nacimiento a Badajoz. Felipe de la Gándara (1677) afirma que nació en Galicia y era natural de Badajoz (?).  Es en 1830 cuando Washington Irving (inglés) y Manuel José Quintana (español) aseguran que nació en Jerez. Sitio de nacimiento que es aceptado oficialmente a partir de 1913 en el cuarto centenario del “descubrimiento” del Mar del Sur. 

Entre 1475 y 1500. En su juventud, sirvió como paje del señor de Moguer, don Pedro de Portocarrero. 

Oct. 1492. Cristóbal Colón “descubre” América, llegando a la isla de Guanahaní (San Salvador). Recorre las Bahamas, Cuba y Haití. 

1493. Se establece una colonia española permanente en Haití (La Española). 

1 de agosto de 1498. Tercer viaje de Colón. Llega por primera vez al continente (Tierra Firme) en la zona de Paria (Venezuela), recorre la costa de Venezuela, isla Margarita, Trinidad. Descubriendo oro y perlas, lo que va a motivar las siguientes expediciones y la ambición de los españoles por viajar al Nuevo Mundo. 

1497-98. Juan Cabot y su hijo, Sebastián, recorren la costa de América del Norte. 

1496. Bartolomé Colón (hermano de Cristóbal) funda la ciudad de Nueva Isabela (Santo Domingo). 

1499. El rey Fernando, motivado por el descubrimiento de perlas del tercer viaje de Colón, rompe compromisos de derechos de éste adquiridos en las Capitulaciones de Santa Fe (Granada) en 1492 y autoriza expedición de Alonso de Ojeda a la región de Venezuela. Acompañan a Ojeda el piloto Juan de la Cosa y el cartógrafo Américo Vespucio.  Ojeda navegó el golfo de Venezuela, Cuquibacoa hasta el cabo de la Vela (La Guajira) y de allí retornó a La Española el 5 de sept. de 1499. Retorna a España en julio de 1500. 

1499. Casi inmediatamente a Ojeda se autoriza expedición de Pedro Alonso Niño, piloto de Colón en el tercer viaje, a emprender la misma ruta. Retornó a España, por Galicia, en mayo de 1500, antes que Ojeda (pues no paró en La Española) cargado de oro y perlas. Según Anderson es el primer viaje que deja amplios beneficios financieros. Lo cual le costo la cárcel a Niño pues los funcionarios de la Corona opinaban que escondía parte del tesoro para no pagar la totalidad del 1/5 que le correspondía al Estado. 

Octubre de 1500. Rodrigo de Bastidas, opulento notario del barrio de Triana, Sevilla, obtiene licencia para una expedición a la misma zona de Venezuela. Se le autoriza a adquirir bienes de todo tipo, incluyendo perlas, oro, joyas, metales, especies de animales, esclavos, etc. Deducidos los gastos de viaje, que corren por su cuenta, ¼ para el Soberano y el resto para él. En este viaje se embarca Vasco Núñez de Balboa. El piloto nuevamente es Juan de la Cosa. 

1500. Expedición de Bastidas sale de Cádiz, se dirige a Las Canarias y desde allí a la costa occidental de Venezuela. Llegan a una “isla verde”, que no se identifica. Al llegar al Cabo de la Vela (punto límite explorado por anteriores) siguen hacia occidente. Llegan a Río Hacha (Guajira), Santa Marta (donde los indios se adornaban con coronas). 

Marzo de 1501. Llegan a desembocadura de un gran río que llamó Magdalena. Bahía de Cartagena (nombrada así posteriormente), isla Barú, islas Arenas, y archipiélago de San Bernardo. Dsembocadura río Sinú. Isla de Tortuga (Tortuguilla actual). Punta Caribana, entraron al golfo de Urabá (Darién) pensando que era un estrecho y cuando echaron anclas a solo cuatro brazas de profundidad se dieron cuenta que era agua dulce, por ello denominaron inicialmente Golfo Dulce (g. de Urabá). Según Anderson todo este trayecto permitió a Balboa conocer las tribus de la región que luego le sería util, pues supo que los indios de la costa oriental del Urabá usaban flechas envenenadas y los de la costa occidental no.  

1501. Bastidas sale del g. de Urabá y se dirige a cabo Tiburón y explora la costa norte de Panamá y llega a donde luego seria fundada Nombre de Dios. De aquí zarpan hasta Jamaica (no colonizada aún) con problemas en los buques que hacían agua porque un molusco (teredo navalis) se comía el casco de las naves. De ahí hasta el islote de Contramaestre a una legua de La Española. zarpan, pero un vendaval les hace retornar al islote. Como los buques hacen mucha agua se dirigen al puerto de Jaragua (suroeste de la Española, hoy Haití). Lugar donde finalmente se hundieron los buques de Bastidas. Murieron muchos indios que traían encadenados y se perdió parte del botín de oro y perlas, pero la mayoría fue salvada. Bastidas dividió los hombres en tres grupos que por caminos distintos se dirigieron a pie hasta Santo Domingo. En esta ciudad, el gobernador Bobadilla (que había arrestado y deportado a España a los hermanos Colón), arresta a Bastidas y le decomisa el cargamento aduciendo que comerciaba ilegalmente y le deporta en 1502 arrestado a la Península. El hecho casual del hundimiento hizo que Balboa se quedara en La Española. 

1502. Cuarto y último viaje de Colón. En sentido contrario a Bastidas recorre la costa caribeña de Centroamérica hacia el oriente, llegando hasta inmediaciones de Nombre de Dios, donde se entera por los indios que Bastidas estuvo antes. 

15 de abril de 1502. Llega a La Española una gran flota con nuevo gobernador que reemplaza a Bobadilla, el comendador Nicolás de Ovando. 

29 de junio de 1502. Colón en cuarto viaje retorna a Santo Domingo, pero Ovando no le permite atracar, pese a que el Almirante avisa de la llegada de un huracán. Ovando no hace caso y permite el zarpe de la flota con destino a España, 30/6/1502. Se perdieron más de 20 buques y 500 personas, entre ellas el exgobernador Bobadilla (y otros enemigos de Colón), doscientos mil castellanos en oro, incluida la mayor pepita encontrada en La Española. Sólo se salvó el pequeño buque “Aguja” (considerado el peor) con 4000 pesos oro y bienes confiscados a Colón. Las Casas consideró el ciclón como un castigo divino. El buque de Colón se salvó porque se refugió en una caleta. También se salvó el buque en que viajaba deportado Bastidas con su botín incautado porque volvió a Santo Domingo. Cuando llegó a España finalmente le levantaron los cargos. 

1502-1509. No consta que Balboa recibiera pago por botín de Bastidas. Pero el gobernador Ovando le otorgó tierras y un repartimiento de indios, en Salvatierra de la Sabana, al suroeste de La Española. No hay relatos (según Anderson) de cómo fue la vida de Balboa en La Española. 

9 de junio de 1508. La Corona española divide mediante un “asiento” Tierra Firme en dos zonas administrativas: Veragua y Nueva Andalucía, divididas por una línea imaginaria así: desde la costa occidental del golfo de Urabá hacia el poniente, Veragua, cuyo gobernador sería Rodrigo de Nicuesa, con asiento en Nombre de Dios (Panamá al este de Portobelo); y desde la margen oriental del g. de Urabá hacia el oriente, Nueva Anadalucía, cuyo gobernador sería Alonso de Ojeda, con asiento en San Sebastián (al oeste del g. de Urabá). Ambos asentamientos van a tener problemas desde el principio por la resistencia de los indígenas y ambos gobernadores van a resultar heridos por las flechas.  

Noviembre de 1509. Zarpan para el continente, con una diferencia de 8 días (entre el 14 y el 22 de noviembre). La peor parte la llevó Ojeda que primero entró en la bahía de Calamar (Cartagena) atacó a los indios (Calamari) y obsesionado por el oro, entró varios kilómetros (contra el consejo de Juan de la Cosa, que le acompañaba). Entraron a una gran población (Turbaco) que estaba vacía y empezaron a saquear, hasta que los indios volvieron y les atacaron estando dispersos. Solo se salvó Ojeda y otro acompañante, muriendo el resto de los españoles incluido la Cosa. Vuelve al barco y se mudan a Urabá (San Sebastián) donde siguen bajo ataque indígena, e incluso es herido el propio Ojeda. En mayo de 1510, desesperado, Ojeda retorna por refuerzos a La Española, pero va a dar a Cuba, que no estaba colonizada. No volvería más a este continente.  Deja a cargo del poblado a Francisco Pizarro. Este dato es importante porque el papel de Balboa para instalar un asentamiento seguro va a ser decisivo posteriormente. Se cre que Balboa intentó partir con Ojeda y no se le permitió, en noviembre de 1509, cuando parten ambas expediciones. 

A Nicuesa no le fue mejor. Guiado por el piloto Ribero y por las descripciones del Cuarto Viaje de Colón, buscó el río Veragua viajando de este a oeste. Lo paso y llegó hasta la laguna de Chiriquí y sus islas, donde intentando caminar por tierra fueron atacados por los indios. Se mueven luego hacia el este e intentan fundar el pueblo Nuestra Señora de Belén en la desembocadura del río Belén, pocos kilómetros al este del río Veraguas. Los indios huían llevándose consigo los alimentos. Muchos españoles morían enfermos o por los indios. Se retiran de Belén. Más hacia el este llegan a la bahía de Porto Bello (bautizada así por Colón). Nuevas penalidades, los indios matan a unos 20 españoles, y se mudan a otra bahía que conocía uno de los marineros que estuvo antes con Colón, que llamaban puerto de Bastimentos. Se dice que Nicuesa, cansado y hambriento dijo: “Paremos aquí en el nombre de Dios!” (Anderson, p. 61) y se quedó con ese nombre, el 9 de noviembre de 1510. La mayoría de los hombres moría porque no aguantaban el clima tropical. Según Las Casas (citado por Anderson), nadie moría sino cuando bajaba la marea. Al final sólo le quedan 200 de los 580 hombres que habían zarpado de La Española. Pero, aunque al principio Nombre de Dios fue abandonada por Sta. María, en unos años los españoles retornarían a ella abandonando Acla y Sta. María. Y esta se convertiría en ciudad colonial junto con Panamá en el Pacífico. 

Septiembre de 1510. El bachiller Martín Fernández de Enciso, alcalde mayor de Ojeda, parte de Santo Domingo para llevarle ayuda. Parte con un buque y un bergantín, 150 hombre armados, yeguas, cerdos y demás provisiones. Allí va escondido Balboa, unos dicen que en una vela y otros que en un barril. Anderson opina que ambas cosas pueden ser ciertas porque paso de la vela al tonel. Le escondió su leal amigo Bartolomé Hurtado (al que premiará bien posteriormente). Descubierto por Enciso, éste amenaza con dejarle en una isla desierta, pero Balboa alega a su favor la experiencia en la expedición de Bastidas (otros le apoyan). Se salva. “Dios tenía determinado de hacer otra cosa dél, por su mal” (dictaminará años después sobre este incidente el Obispo de Chiapa).  

Sept. 1510. Pizarro abandona San Sebastián con dos bergantines, uno de los cuales zozobra y todos perecen. Con los últimos 40 hombres retorna a Calamar, donde encuentra a Enciso. Enciso al principio desconfía de Pizarro, creyendo que se había amotinado y no cree que sea todo lo que queda de la expedición de Ojeda. Pizarro y sus hombres ofrecen todo el oro que tenían a cambio de que se les permita volver a La Española o irse a Veragua con Nicuesa. Pero Enciso no lo permite pues teme perder su inversión y cargo de alcalde. Vuelven a San Sebastián. La mala suerte acompañaba a Enciso, su buque choca contra un banco de arena y se hunde con todas las provisiones y caballos. Con los dos bergantines siguen a San Sebastián para encontrarlo quemado por los indios. Enciso con 100 hombres lanza un ataque en busca de oro y comida y resultan muchos heridos por los indios caribe, huyendo de vuelta al poblado. Se dice que, abatido, intentó irse con unos cuantos leales, abandonando a los demás, lo cual le hizo perder autoridad. Querían volver, pero no podían embarcar 180 hombre en dos bergantines. “Dejemos estas costas mortíferas de donde el mar, la tierra, el cielo y los hombres nos rechazan”, decían (Anderson p. 49). 

Sept. 1510. En el marco de esta crisis es cuando empieza a destacar el carácter y la experiencia de Balboa. Recordó que en el viaje de Bastidas habían encontrado en la otra orilla del g. de Urabá un pueblo “mui fresco i abundante de comida, i que la Gente no ponía Jerva (Yerba o veneno) en las Flechas”. Eran las tierras del cacique Cémaco (aunque la ciudad y los “indios” se denominaban Darién). Pero también la otra orilla (occidental) del Urabá era Veragua perteneciente a la jurisdicción de Nicuesa. Se encomendaron a la “Nuestra Señora de la Antigua” (venerada en Sevilla), Enciso hizo la invocación, y se enfrentaron a 500 indios a los cuales vencieron. Se enfrentaron las lanzas y flechas de madera de los darienes contra las espadas metálicas y mosquetes de los españoles. Allí mismo fundaron un poblado que denominaron Santa María la Antigua en agradecimiento a la virgen que les dio la victoria. El saqueo además produjo 10 000 castellanos en oro y prendas (103 libras de oro fino).  

Sept.-nov. 1510. Sta. María. Empiezan rápidamente los conflictos entre los propios españoles. Enciso exige que todos presenten ante él la cantidad de oro conquistado por cada uno, alegando que el derecho a controlar esos ingresos en nombre de la Corona y que se lo había dado Ojeda en el contrato. No pudiendo mostrarlo una asamblea (Cabildo) le retira el mando aduciendo que, al estar en el área de Nicuesa, carece de poder legítimo. En sustitución eligen dos alcaldes: Balboa y Martín de Zamudio. En noviembre entran al golfo dos buques comandados por Rodrigo Enrique de Colmenares, lugarteniente de Nicuesa, enviado a apoyarle desde La Española. Colmenares, Balboa y los cabecillas acuerdan que el primero busque a Nicuesa y le traiga a Sta María. El único que se opone es Enciso. Se designa a Diego Albítez y Diego del Corral para que sean portavoces de la ciudad ante Nicuesa. 

Dic. 1510 - marzo 1511. La comitiva de Colmenares llega a Nombre de Dios con las provisiones. Los emisarios hablan con Nicuesa la situación de Sta. María, pero éste comete el exabrupto de decir que decomisará el oro y destituirá a las autoridades cuando llegue. Albítez y del Corral adelantan la vuelta a Sta. María y advierten pretensiones del gobernador. El Cabildo decide no dejarle desembarcar y hacen un juramento colectivo, dirigidos por Balboa. Según Anderson, aquí hay dos versiones: A. La de Oviedo que dice que al llegar Nicuesa a Santa María (fines febrero) le admite Balboa en su casa por tres semanas hasta que le echan; B. la de Las Casas que dice que no se le permitió desembarcar. El gobernador Nicuesa fue aprehendido, puesto en un bergantín con pocas provisiones, 6 acompañantes y 7 marineros. Nunca se supo qué le sucedió. También hay debate histórico sobre el grado de responsabilidad de Balboa en la decisión. Anderson tiende a justificarle que diciendo que fue una decisión colectiva. 

Marzo a dic. 1511. Expulsado Nicuesa, Balboa dirige un juicio a Enciso, al cual se le expropian sus bienes y envía con cargos a España, acompañado por el alcalde Zamudio (que debía defender los argumentos de Balboa). Este logra su objetivo ante Diego Colón gobernador de La Española que escribe al rey Fernando que había nombrado a Balboa su lugarteniente y le enviaba ayuda. Hacia julio de 1511 todos lo españoles de Nombre de Dios habían sido trasladados a Santa María. En el viaje de búsqueda, Colmenares recoge a dos españoles fugados de la expedición de Nicuesa que habían convivido con la tribu del cacique Careta de la etnia Cueva, ubicada donde estaría Acla. Estos alegan que tienen oro y Balboa hace una expedición sometiéndolo, pero no es esclavizado a cambio de que produzcan la tierra para los españoles. El cacique entrega a su hija CARETITA (así la identifica Oviedo, NO ANAYANSI) como esposa de Balboa. El rey expide el 23 de diciembre de 1511 Real Cédula nombrando a Balboa gobernador interino del Darién. 

1512. Resuelto el conflicto de autoridad, Balboa se dedica a conocer y conquistar a las tribus de la zona, pactando con algunas de ellas. Logra establecer la siembra de maíz en Santa María y recibe refuerzos desde La Española y España. Pero en la Corte empieza la trama contra Balboa dirigida por Enciso. 

20 de enero de 1513. Balboa escribe al rey Fernando su documento más importante, una larga carta en la que informa con detalle de la situación de Santa María, los diferendos con Enciso y Nicuesa, las tribus de la región, la geografía, etc. Describe la tribu de Careta, la de Comogre (hoy Ailigandí) colindante con éste, que tenía 10,000 súbditos y pactó pacíficamente con Balboa. Comogre obsequió a Balboa piezas de oro valoradas en 4,000 pesos y 7 esclavos. Al repartirse el botín los españoles, una vez sacado el “quinto” del rey, se armó un gran revuelo. Viendo esto Panquiaco, hijo de Comogre dijo: “Cristianos! Qué es esto? Por qué peleáis por semejantes bagatelas? Si amáis de tal suerte el oro que para obtenerlo abandonáis vuestros hogares y corriendo tantas fatigas y peligros venís a perturbar la tranquilidad de estas pacíficas regiones, voy a indicaros una provincia en donde podréis satisfacer vuestros apetitos; pero para hacer esto, es necesario que seáis un mayor número que ahora, pues tendréis que contender con grandes reyes que defenderán sus países con mucho valor y encarnizamiento. En primer lugar, váis a encontrar al rey de Tubanamá, que tiene en abundancia ese oro que tanto apreciáis, y cuyos dominios se encuentra a unos seis soles de nuestro país” (Anderson, p. 108).  Entonces, señalando con el dedo hacia el sur les habló de otro mar. 

31 de mayo de 1513. La respuesta del Rey Fernando a la carta de Balboa fue ordenar en esta fecha la organización de una gran Armada para viajar al Darién a cuyo mando él pondrá un miembro de la corte de su confianza. Se ordena que lleve entre 800 y 1000 hombres, suficientes provisiones, etc. Se autorizan gastos por 5 millones de maravedíes. Según Anderson, el Rey Fernando tuvo 3 objetivos: 1. Como no confiaba en Balboa iba a colocar al mando de Darién un hombre de su confianza; 2. Sospechaba que los portugueses querían disputarle Tierra Firme; 3. Ir en busca inmediata del otro mar. 

27 de julio de 1513. Rey Fernando en un decreto denomina Castilla del Oro a lo que hasta entonces se llamaba Darién y nombra a Pedrarias Dávila capitán general y gobernador. 

28 de julio de 1513. Rey Fernando ordena a Pedrarias investigar judicialmente actos de Balboa cuando llegase a Santa María. 

1 de septiembre de 1513. Embarca Balboa en Santa María en busca del Mar del Sur, con 190 españoles, algunos indios, una jauría, un bergantín y 10 canoas indígenas. 

6 de septiembre llega a tierras de Careta (hoy Punta Carreto, entre Puerto Escoces y Mulatupu), donde se fundó Acla. Suman 1,000 “indios” a la expedición y se internan a tierras de Ponca al cual vencen.  

Entre el 20 y 24 de septiembre viajan a través de la selva llegando a tierras de Toarecha (pueblo de Cuarecuá o Quarequá o Careca, que no eran de la etnia Cueva, según Cook, p. 55), donde exhaustos acampan.   

El 25 se sept. Balboa se interna al río Chucunaque con un grupo más pequeño (?). Allí ese día, adelantándose al resto sube la cumbre de un cerro los linderos de Cuarecuá Balboa donde avista el Mar del Sur. El cura de expedición, Andrés de Vera, realizó un Te Deum Laudamus y los hombres erigieron pirámides de piedra y marcaron cruces en los árboles para señalar el sitio. 

29 de septiembre. Bajan a tierras de Chiapes tras una breve escaramuza son vencidos. Aquí Balboa organiza 3 grupos para encontrar camino al mar. El grupo de Alonso Martín, luego de 2 días de caminata, llegan a la playa. Informado Balboa, con 26 hombre llega a la orilla el día 29/9/1513. Se interna en el mar hasta la rodilla, y alzando ambos brazos, en uno empuñando la espada y el otro un estandarte con la imagen de la Virgen María toma posesión para España del Mar del Sur. Había recorrido 110 kilómetros a pie. Llamó al golfo donde estaba Golfo de San Miguel por ser el santo de ese día. Estuvieron presentes 27 españoles como testigos del hecho de lo cual tomó acta el notario Valderrábano. 

El 7octubre de 1513, se dirige a tierras de los caciques Cocura o Coquera o Cuquera y Tumaco (Punta San Lorenzo). Tumaco confirma a Balboa la existencia de una gran nación al sur (Perú) que usaba barcos de vela y un animal de carga (llamas). Entre los presentes estaba Francisco Pizarro. Allí se entera de la pesquería de perlas en la isla de cacique Terarequí. Se embarca el 29 de octubre con 60 hombres y nueve canoas hacia ellas y llega a la que llamó Isla Rica (Isla del Rey) y bautizó el archipiélago como de Las Perlas.  

Noviembre de 1513. Balboa emprende el regreso a Santa María por un camino distinto y atraviesa las comarcas de Teoca, Pacra, Bugue Bugue, Bononaima y Chiorizo, negociando con unos y masacrando militarmente a otros. Luego Tubanamá, que opuso gran resistencia hasta llegar a tierras de Pocorosa (hoy Playón Chico) en el Caribe.  

19 de enero de 1514 retorna a Sta. María con más de 100 mil castellanos en oro, incontables perlas, prendas de algodón, etc. Designa a Pedro Arbolancha para que viaje a España a informar del “descubrimiento” y entregar el 1/5 de la Corona. 

El domingo de “carnestolendas” (de Carnaval, previo al miércoles de Ceniza) de 1514 la Armada zarpa hacia América, pero un vendaval le obliga a volver. ¿Presagio? 

11 de abril de 1514, martes santo, finalmente zarpa la Armada, con orden de dirigirse directamente a Santa María sin pasar por La Española, pues el rey Fernando no confiaba en el Virrey Diego Colón. Viajan por Las Canarias y el primer lugar al que llegan en el Continente es la isla de Martinica. Son 17 naves, con 1,500 hombres y varias mujeres españolas, entre ellas Isabel de Bobadilla, mujer de Pedrarias. Es la mayor flota que hasta ese momento ha zarpado al Nuevo Mundo. Acompañan otras autoridades a Pedrarias: Gaspar de Espinoza (Alcalde Mayor), Gonzalo Fernández de Oviedo (oficial real), Juan de Ayora (lugarteniente de Pedrarias), obispo Juan de Quevedo, el mayor enemigo de Balboa, Gonzalo Fernández de Enciso como Alguacil mayor. 

30 de junio de 1514. Llega la Armada a Santa María.  El pueblo tenía entre 100 y 200 casas (Bohíos de paja, según Celestino Araúz) y contaba con 500 españoles, que tenían a su servicio 1,500 indios naboríes para trabajos domésticos. Pedrarias y Gaspar de Espinoza abren proceso a Balboa y le obligan a pagar indemnización a Enciso y otros, pero es absuelto de responsabilidad por muerte de Nicuesa. Queda libre.  

11 de septiembre de 1514. Pedrarias y sus oficiales realizan un consejo para ver situación crítica en Santa María. El invierno había hecho intransitables las calles, la hierba crecía por doquier, el oro estaba difícil de conseguir sin ir a laborarlo (sacar pepitas de los ríos). Cosa curiosa: intentan contratar 10 hombres dispuestos a trabajar (de 230 asalariados que llegaron), no se ofrece ninguno. “Los españoles no habían ido a Castilla del Oro a trabajar: habían venido para obtener oro” (Anderson, p. 405). Hambrientos jóvenes aristócratas mendigaban o comían hierbas y raíces igual que animales, 32 personas fallecían en promedio por día quedando los cuerpos insepultos (Anderson p. 406). Parte de la Armada decidió regresar unos a España, otros a La Española. Según Oviedo murieron más de 500 personas, según Andagoya “en un mes murieron 700 hombres de hambre y de enfermedad de modorra” (Anderson p. 407). En siete meses, más de la mitad de la expedición de Pedrarias o había muerto o había huido. 

23 de septiembre de 1514. El Rey Fernando expide el real Decreto que nombra a Balboa ADELANTADO DE LA COSTA DEL MAR DEL SUR Y DEL GOBIERNO DE LAS PROVINCIAS DE PANAMA Y COIBA.  

20 de marzo de 1515 llegan dos carabelas con provisiones a Sta María con los decretos a favor de Balboa, pero Pedrarias los retiene. Recién el entre el 21 y 23 de abril entrega Pedrarias los nombramientos a Balboa, después de que en una reunión de oficiales el Obispo Quevedo advirtiera que era delito no cumplir la voluntad del rey. La gobernatura para Balboa de la Tierra Nueva (Panamá y Coiba) no tenía límites precisos y fue motivo de controversia. 

16 de oct. de 1515. Carta de Balboa al Rey denunciando los abusos de Pedrarias. 

Enero de 1516. Pedrarias retorna a Santa María luego de una expedición de castigo a tribus del Panamá actual y encuentra que Balboa ha reunido un barco y decenas de soldados para una expedición sin su autorización. Le inicia juicio y mete preso. Hasta que el Obispo Quevedo les reconcilia y Pedrarias compromete a su hija Isabel que estaba en España. Balboa acepta y se hace formal compromiso. Pedrarias le llama “hijo”. A mediados de 1516 se traslada a reconstruir Acla. 

23 de enero de 1516. Muere rey Fernando el Católico y hereda el trono Carlos I, que tardó en llegar a España, la cual fue gobernada por el Cardenal Cisneros como regente. 

Entre 1517 y 1518. Balboa se traslada a Acla con 300 hombres, usa mano de obra indígena y esclavos africanos. Construye barcos, navega el Pacífico entre las islas de Las Perlas hasta Puerto Piña. 

Fines de 1518. Pedrarias y otros enemigos de Balboa, temerosos de que sus barcos y exploraciones por el Mar del Sur le lleven a descubrir las tierras del Perú, le arman una serie de acusaciones de traición, incluyendo las que ya habían sido ventiladas en el primer juicio (como la muerte de Nicuesa). Le detiene Francisco Pizarro por orden de Pedrarias y es conducido prisionero a Acla. 

12 de enero de 1519. En un juicio sumario, sin garantías y desoyendo su petición y la costumbre de ser enviado detenido a La española es condenado a muerte por Espinoza. Ese día se ejecuta la sentencia al caer la tarde (Pedrarias observa desde una casa cercana la ejecución). Balboa es condenado por traición junto a sus hombres de confianza: Valderrábano, Luis Botello, Fernán Muñoz y Hernando Arguello. Sube Balboa primero al patíbulo. El pregonero dice: “Esta es la Justicia que manda hacer el rei nuestro Señor, y Pedrarias, su Lugarteniente, en su Nombre, a este hombre, por Traidor, i Usurpador de las Tierras, sujetas a la Real Corona”. Balboa responde: “Es mentira, i falsedad, que se me levanta: i para el paso en que voi, que nunca por el pensamiento me pasó tal cosa, ni pensé, que de mi tal se imaginára: antes fue siempre mi deseo de servir al Rei, como fiel Vasallo, i aumentarle sus Señorías con todo mi poder, i fuerzas”. Luego puso sereno la cabeza en el cepo y el verdugo hizo su trabajo. Pedrarias ordenó que su cabeza permaneciera expuesta en un palo en la plaza del pueblo por varios días.  Según Anderson, Pedrarias demoró en notificar al Rey sobre la ejecución. 

 Bibliografía básica 

 1. Anderson, Charles L. G. Vida y Cartas de Vasco Núñez de Balboa. Emece Editores, S.A. Buenos Aires, 1944. 

2. Araúz, C. A. y Pizzurno, P. El Panamá Hispano (1501-1821). Tercera Edición. Diario La Prensa. Panamá, 1997. 

3. Cooke, Richard y Sánchez Herrera, Luis A. “Panamá Indígena: 1501-1550”. En: Historia General de Panamá. Vol. I, Tomo I. Comité Nacional del Centenario. Panamá, 2004. 

4. Oviedo, Gonzalo Fernández de. Sumario de la Natural historia de las Indias. Colección “Fabio Lozano y Lozano”. Santafé de Bogotá, 1995.




Existe un llamado para ser Instrumento de Dios

 Por: Rev. Padre Manning Maxie Suárez+

Muchas veces hemos escuchado, en los templos cristianos de todo el mundo, en nuestros hogares, en las escuelas sobre todo en las clases de religión que debemos ser instrumentos del Señor.  Pero, alguna vez se han puesto a pensar ¿qué verdaderamente significa profundamente ser un Instrumento de Dios? 

Estoy muy seguro, que un gran porcentaje de personas, creyentes y no creyentes no comprenden la magnitud de este llamado.  Este criterio lo tengo después de los treinta y ocho años de servicios cristiano desde mi ordenación al santo ministerio en la Iglesia.  

Vivimos en una época convulsionada y de cambios transcendentales en el desarrollo del pensamiento, de formas y estilos de vida en un siglo que está agobiado por tantos problemas tratando de subsistir en una sola casa común con más de 50 conflictos internacionales, con serios problemas ecológicos creados antropocéntricamente, y con posiciones encontradas en materia de valores y principios tradicionales versus los valores de una modernidad.

Para los hombres y mujeres que seguimos los valores cristianos que podemos llamar también tradicionales, la vida de los santos es de gran ejemplo a la hora de promover valores en una sociedad cuasi evangelizada.  Ellos, hombres y mujeres como nosotros que recibieron un llamado de vida especial y entregaron todo por esa misión de vida que nace de la reflexión y la espiritualidad personal sustentada en el Espíritu y que reconocen ese amor de Dios entendido desde la vida, pasión, muerte y resurrección de nuestro Señor Jesucristo.  El gran Maestro que nos enseñó lo más importante y qué da significación a toda nuestra existencia: Dios mismo en nosotros.

Los Santos de la Iglesia, entendieron que a Dios se le comprende desde la contemplación, desde el silencio, desde el escuchar, desde esa relación de amor profundo con el Señor.  Muchas veces ni siquiera hay que hablar, cantar, gritar, solo basta con estar quietos, solos, y contemplarlo.  Es esta acción de vida que se empodera en el Espíritu para asumir la Misión de Vida.  Aquí es donde nos nutrimos y nos llenamos de su presencia y es esta relación va develando el sentido de nuestra existencia.

Alban Butler (1709 - 1773), quien fue un sacerdote católico y hagiógrafo. Ordenado al presbiterado en 1735 y quien ejerció las cátedras de filosofía y teología. Es el creador de una de las obras clásicas de la Iglesia donde nos pone en contacto con la Vida de los Santos.  En esta obra uno queda maravillado de las vidas de miles de hombres y mujeres que al haber tenido una experiencia religiosa tomaron la decisión de dedicar sus vidas al servicio de Dios y los hombres convirtiéndose en Instrumentos de Dios.

Se nos habla de San Remigio, Obispo de Reims (c. 530 d.C.), de san Melorio, mártir.  De santa Teresita del Niño Jesús, virgen (1897 d.C.). De san Gerardo De Brogne, abad (959 d.C.). Del beato Domingo Spadafora (1521 d.C.). De san Francisco de Asís, fundador de los frailes menores (1226 d.C.). De san Petronio, Obispo de bolonia (c. 445 d.C.). De santo Tomás, Apóstol. Entre muchos otros que estoy seguro que, no conocemos o nunca hemos oídos pero que son parte del gran santoral de la Iglesia y donde Alban Butler da a conocer esa biografía de estos hombres y mujeres de Dios al servicio del hombre y del mundo.  Sumemos a estos nuestros santos latinoamericanos como San Héctor Valdivielso (Benito de Jesús) argentino, San Antonio de Santa Ana Galvao Brasileño, Santa Teresa de Los Andes Chilena, Santa Laura de Santa Catalina de Siena, Colombiana y nuestro querido y amado Beato Oscar Romero, Salvadoreño entre otros. Ejemplos no nos faltan,

Pero fue casualmente San Francisco de Asís, fundador de los frailes menores (1226 d.C.) quien nos ha hecho más concientes de esa frase ya famosa en su ya oración “Hazme un Instrumento de tu paz”, hoy día rezada por millones de personas alrededor del mundo y cantada en la liturgia cristiana como una plegaria, invocación y compromiso hacía Dios de brindarnos todos como “Embajadores de la Paz de Dios” en y para el mundo.  Seria bueno una lectura diaria, como se hacía en tiempos antiguos, de la vida y obra de estos servidores de Dios.

Estoy seguro que encontraremos ejemplos de vida a seguir como el modelo para la juventud (San Juan Bosco) y para todos hoy, en ellos encontraremos valores y principios como la Fe en Jesucristo; el Amor y la praxis de la caridad; Entenderemos que somos Comunidad y nuestra unidad es porque Jesús y el Padre son Uno; A practicar la Humildad y el perdón; Comprometernos con la Evangelización del mundo; Aceptar el Martirio como consecuencia de la evangelización, los mártires cristianos eran vistos como ejemplos de fe inquebrantable y valentía en la defensa de su creencia.  La Obediencia a la voluntad de Dios; Mantener esa fe en la Esperanza en la vida futura, La cristiandad primigenia enseñaba la esperanza en la vida después de la muerte y la resurrección final en la segunda venida de Cristo.  Y finalmente reconocer el bautismo y la participación en la comunión eucarística, que eran prácticas fundamentales para los creyentes, simbolizando la unión con Cristo y con la comunidad de fe.

Todo ello, aceptado por fe y puesto en práctica por la fuerza del Espíritu nos ayudará a ser Instrumentos de Dios, hacedores de la paz, Embajadores de la paz en un mundo confundido por sus pecados y por estar apartados de los principios y mandamientos de Dios.  Mi súplica para Panamá y el mundo hoy es: “Señor Haznos Instrumentos de tu Paz”.

Sacerdote y Académico.

Panamá: las contradicciones de la contradicción

Por: Dr. Guillermo Castro H.

 “El   moderno sistema mundial nació a lo largo del siglo XVI.  América -como entidad geosocial- nació a lo largo del siglo XVI. La creación de esta entidad geosocial, América, fue el acto constitutivo del moderno sistema mundial. América no se incorporó en una economía-mundo capitalista ya existente. Una economía-mundo capitalista no hubiera tenido lugar sin América.” Aníbal Quijano e Immanuel Wallerstein, 1999[1]

            

La sociedad panameña ingresó en un proceso de crisis política abierta desde julio de 2022. Comprender el desarrollo de ese proceso hasta el presente, y sus perspectivas de corto y mediano plazo, demanda distinguir entre la contradicción principal que afecta al país, y el aspecto principal de esa contradicción en las diversas etapas de ese proceso.

Esa contradicción principal radica en el agotamiento de lo que cabría llamar el modelo transitista de desarrollo, que desde el siglo XVI ha concentrado lo fundamental de la actividad económica y del poder político en los grupos sociales que controlan el tránsito interoceánico por el Istmo. Por su parte, el aspecto principal de esa contradicción se expresa en la creciente incapacidad de los sectores dominantes en ese modelo para comprender y atender a los problemas que lo afectan.

Para el siglo XX, esa función vino a quedar a quedar en manos de los Estados Unidos, que lo ejerción para adelantar sus aspiraciones a la hegemonía global que vendría a alcanzar tras la Gran Guerra de 1914-1945. Estados Unidos ejerció ese control al amparo de un régimen de protectorado militar establecido en el Tratado Hay-Bunau Varilla de 1903 - y ampliado después por la Asamblea Constituyente de 1904. Ese protectorado fue organizado mediante la creación de un enclave colonial conocido como Zona del Canal.

Aquel enclave extranjero vino a desintegrarse entre 1979 y 1999 según lo acordado en el Tratado Torrijos-Carter. A partir de allí, pasó a reconstituirse después, a escala ampliada, como una Plataforma de Servicios Transnacionales para la circulación del capital, que genera el 80 por ciento de los ingresos del país. La creación de ese enclave ampliado recibió un impulso decisivo tras el golpe de Estado de diciembre de 1989, que liquidó un régimen militar ya destrozado por sus conflictos internos, y lo sustituyó por una versión renovada de la democracia oligárquica que había imperado en país entre 1903 y 1968.

Para ese entonces, el transitismo nacionalizado gozaba de un prestigio y una credibilidad – expresada por ejemplo en la gestión exitosa de la vía interoceánica bajo administración panameña. Hoy, sin embargo, el transitismo enfrenta una situación de descrédito en la que se combinan factores como una grave situación de inequidad en el acceso a los frutos del crecimiento económico, el descrédito del sistema político-partidista restablecido a partir de enero de 1990, y la acumulación de grandes problemas que el Estado no está en capacidad de encarar con el país al que debe servir.

En efecto, los grandes beneficiarios de la ampliación del enclave de servicios transnacionales no se han mostrado interés por la integración del Canal a la economía interna, ni por la de esa economía en el mercado global a partir por ejemplo del fomento de nuevas ventajas competitivas en sectores como la producción agropecuaria y la de servicios ambientales. Con ello, no solo han privado al país de nuevas modalidades de desarrollo, sino que han contribuido en la práctica al agravamiento de los problemas que el modelo de desarrollo vigente no está en capacidad de resolver.

En lo más visible, esos problemas van desde el grave deterioro de los servicios públicos de seguridad social, educación y salud hasta los que presenta la sostenibilidad del Canal debido a las crecientes limitaciones en la oferta de agua dulce que requiere su funcionamiento. A ello ha venido a sumarse la metástasis de la economía de enclave, ahora en la forma de una explotación  minera de cobre a cielo abierto que viene operando en la región centro-Occidental de la vertiente atlántica del Istmo desde fines de la década 1990.

La legitimación de dicho enclave minero mediante un contrato con el Estado, que muchos consideran lesivo a los intereses del país y de graves consecuencias ambientales, ha pasado a convertirse ahora en el aspecto principal del deterioro del modelo de desarrollo transitista. En la práctica, el Estado ha perdido la capacidad para procesar y encauzar hacia objetivos comunes los conflictos derivados de ese deterioro, que no permite garantizar una prosperidad equitativa, sostenible y democrática en el país.

En julio de 2022 la crisis que encaramos hoy tuvo su primera manifestación en movilizaciones sociales que paralizaron el país en reclamo de atención a los problemas derivados de la inflación, el desempleo y del deterioro de los servicios de salud, seguridad social y educación. Esa ha venido operando desde entonces, parafraseando al general Omar Torrijos, como un serrucho, que avanza y retrocede, pero cortando siempre.

Interesa, en todo caso, observar que de ese ir y venir participan todos los sectores de la vida nacional. En el caso de la minería, por ejemplo, unos rechazan el contrato, pero no a la mina en explotación; otros demandan el cierre de la empresa; otros, la prohibición de la minería en el país, y otros más piden combinar la aprobación del contrato con la declaración de una moratoria de la actividad minera.

Y emergen ahora – en la mejor tradición de maniobra política criolla – quienes recomiendan suspender el proceso de aprobación parlamentaria para volver a la mesa de negociación mientras se diluyen las tensiones. Esto, sin embargo, equivale a remitirle el problema al gobierno que surja de las elecciones de mayo de 2024, agregándolo a los de la Caja de Seguridad Social, y a los de las inversiones que demandará garantizar el abastecimiento de agua para el Canal mediante el trasvase de ríos colindantes con la explotación minera en curso.

Alguien dijo alguna vez que la solución de grandes problemas genera siempre problemas nuevos y más complejos. Estamos en las vísperas de aprender los problemas nuevos y más complejos que resulten de la incapacidad para encarar y resolver, con la sociedad y no simplemente para ella, las contradicciones que surgen del agotamiento del modelo de desarrollo imperante en la sociedad panameña desde los orígenes mismos del mercado mundial.

Alto Boquete, Panamá, 22 de septiembre de 2023

[1] “La americanidad como concepto, o América en el moderno sistema mundial”

https://unesdoc.unesco.org/ark:/48223/pf0000092840_spa

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Reseña del artículo“ LA JUVENTUD PANAMEÑA Y LA GESTA DEL 9 DE ENERO” Marco A. Gandásegui, h. (2016)

 Reseña del artículo“ LA JUVENTUD PANAMEÑA Y LA GESTA DEL 9 DE ENERO”  - 24 pag. 24 del autor Marco A. Gandásegui, h. (2016)

Para entender los sucesos del 9 de enero de 1964, hay que ser panameño. Tal es el efecto de prácticamente un siglo de enclave colonial norteamericano sobre nuestro territorio, aunado a innumerables intervenciones armadas en nuestro país, que a su vez cobraron muchas victimas, en un país bajo la permanente tutela de los EE.UU. y en una situación de vasallaje nacional y racial, que sumado a una pertinaz determinación de varias generaciones de panameños de distintas posiciones políticas para lograr nuestra liberación nacional plena, nos permitió consolidar nuestra Soberanía Nacional tal como se logro en el año 2000, con la salida de las tropas norteamericanas y la devolución del Canal de Panamá. Gandásegui nos recalca el respeto y admiración que sentimos muchos panameños por esa juventud que enmarcó el camino a una soberanía y dominio pleno. Con un solo propósito los mismos se esparcieron por calles y caminos específicos en la ciudad de Panamá con el único objetivo de mostrar nuestra bandera como único símbolo en el territorio istmeño, con el objetivo de buscar nuestra hegemonía. 

Debemos aclarar que la Gesta del 9 de enero de 1964, encabezada inicialmente por estudiantes, pero seguidos por el pueblo en general, y que contó con la solidaridad de la clase política del país (llevo a la ruptura diplomática momentánea con los EE.UU.) es un hecho histórico relevante en la conciencia colectiva panameña, determinante para nuestra identidad nacional y que contribuyo a la consolidación del Estado Nacional, al imponerle negociaciones a los EE.UU. Marcos A Gandásegui acierta en algo y es lo que hace que esta gesta patriota suene como de superhéroes “Quién se hubiera imaginado que una juventud rebelde pondría fin a esa absurda pretensión de Washington de convertir a Panamá en su colonia a perpetuidad?”

Valorando las certeras palabras de este autor, me es necesario aclarar que después de todo el recorrido de aquellos jóvenes con el objetivo de izar nuestra bella bandera nacional se abrieron caminos los cuales determinaron los Tratados del Canal de 1977, y la  devolución del Canal a Panamá con la salida de las bases militares norteamericanas el 31 de diciembre de 1999, al iniciar el presente siglo.

Explicar detalle a detalle como ocurrió todo exactamente es un paso grande para valorar nuestra cultura. Desde el momento en el que la policía Zoneita impidió el paso de la manifestación, permitiendo el acceso al plantel de una delegación de solo seis estudiantes panameños para dar paso a la colocación de la bandera  Nacional y que no cumplieran con su palabra dio inicio a esta gran revolución, así es, como lo mencioné, la delegación panameña fue reprimida por la policía norteamericana, lo cual generó la reacción inmediata del resto de los Estudiantes que habían Marchado pacíficamente al territorio Zoneita,  como si Panamá le hubiera declarado la guerra…entre hechos no mencionados por el autor y que me parece de carácter importante para comprender mejor que aquella gesta no fueron solo actos de rebeldía, hubieron actos como el cierre del puente de las Américas que motivo aún más aquella generación, aquel 9 de enero, se apoderaron del corredor a la ciudad de Colon, incluso la toma de la ciudad misma, y no está de más mencionar nuevamente  el uso de fuego armado  a las zonas adyacentes, lastimosamente desencadenó consecuencias ya conocidas: 21 muertos y 500 heridos por parte de la Población Panameña. Los primeros disturbios, son pruebas irrefutables de que, en esos días, la tropa agredió a la población Panameña cumpliendo órdenes emanadas de las más altas autoridades norteamericanas.

Los hechos acontecidos antes del año 1964 dieron partida a lo que ya conocemos como el “Dia de los mártires”  Gandásegui lo detalla perfectamente y esto fue el aprovechamiento indebido que hizo Estados Unidos de las circunstancias angustiosas o precarias que dieron origen a la independencia de Panamá. Ese aprovechamiento se concretó en el leonino tratado general de 1903 que lesionaba profundamente la soberanía nacional. Aún fresca la tinta que dibujó la firma de Felipe Bunau-Varilla al suscribir el 18 de noviembre de 1903 el nefasto documento (pág. 10)

El 10 de enero de 1964, el presidente de Panamá Roberto Chiari decide romper relaciones diplomáticas con los Estados Unidos como respuesta a la ofensiva del ejército estadounidense contra el pueblo panameño, exactamente así lo menciono en una carta enviada justo a las 3:00 Pm al encargado de negocios Wallace Stuart:

“Finalmente cumplo con informar a Vuestra Excelencia que, debido a los sucesos a que antes me he referido, el Gobierno de Panamá considera rotas las relaciones diplomáticas con su ilustrado Gobierno, y en consecuencia, ha impartido instrucciones a Su Excelencia el Embajador Augusto G. Arango, para que regrese cuanto antes a la Patria.”

 Tal vez en mi escrito suene sentimental, pero imaginar cada suceso es un poco agridulce, sobre todo al conocer palabras de muchos de aquellos autores de esta gesta: Seguiré soportando el dolor porque la lucha que hicimos fue de alma y corazón por ver a mi Panamá libre”, dijo al diario La Estrella de Panamá en 2017 Claudio Márquez, panameño herido en aquella jornada y que conserva una bala alojada en su cuerpo. ¿Cómo no sonar sentimental o enorgullecerme de aquellos jóvenes? Gracias a ellos hoy camino por una ciudad hermosa, plena y soberana, igual que muchos de mis familiares y 4 millones panameños más.

La historia panameña tiene un sinfín de sacrificios y luchas que a medida que se fueron dando, indicaron el camino para una soberanía plena. Pero la fecha para recordar y que enmarcó una gran diferencia fue aquel “9 de enero de 1964”

 Marcos A Gandásegui nos deja claro su mensaje en su escrito, el cual es no olvidar lo sucedido aquel dia y en los días posteriores para que los demás jóvenes sepan como sucedió todo. Sobra decir que estos eventos marcaron un antes y después en nuestra historia. El objetivo de los Mártires se logró. La memoria histórica de estos hechos deja una huella imborrable en el corazón de nuestra nación, aprendamos del pasado, no olvidemos el legado de tantos caídos y héroes que expusieron sus vidas en beneficio de todas las generaciones que vendrían, recordémoslos y honrémoslos con respeto, sus nombres quedarán escritos para siempre en el alma de la patria.  (Portugal, 2021)

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Autora: Kristell Prado

Estudiante de Licenciatura de la Universidad Cristiana de Panamá

La actividad minera y la ocupación en Panamá

Autora: Irielka Nieto

Estudiante de la Escuela Diurna de Jóvenes y Adultos de La Chorrera

El engranaje de la actividad moviliza desde profesionales obreros sin estudios que realizaran los más diversos oficios. El recurso economía es de gran importancia en diferentes aspectos ya que circula una gran cantidad de poder adquisitivo y cambian los patrones de consumo y la estabilidad en la entrada de la economía local de ingresos y una fuerte migración local en búsqueda de ofertas de trabajo.

Las características culturales de las sociedades campesinas panameñas en las zonas donde se ubican gran parte de la industria minera y dada la gama de recursos que mueven la minería es compleja. El avance de la sociedad industrial delimita espacios de encuentro cultural, económica, ambiental y social que definen una compleja correlación entre el hombre y el espacio desde el punto de vista geográfico que lo rodea.

A un año de la sublevación popular de julio de 2022 - Balance y perspectivas


                                                               Universidad de Panamá

Facultad de Humanidades

Centro de Investigaciones de la Facultad de Humanidades – CIFHU

Departamento de Sociología

Escuela de Sociología

 

Jornada de Reflexión:

A un año de la sublevación popular de julio de 2022:

 Balance y perspectivas

 

Fecha: 23 de agosto de 2023

Salón de Profesores de la Facultad de Humanidades

Hora: (Jornada doble) 8 A.M. a 12:30 M.D. / 5 P.M.

                                                                          

Objetivo: Generar un análisis colectivo sobre las causas del levantamiento popular de julio de 2022, junto a las organizaciones sociales y populares, con la finalidad de recopilar las principales experiencias y balances desde las organizaciones movilizadas.

Organizaciones invitadas:

ALIANZA PUEBLO UNIDO POR LA VIDA, ANADEPO, ASOPROF,  AEVE, Convergencia Sindical, CGTP, SUNTRACS-CONUSI, FUCLAT, Coordinadora de Bases Indígenas de Chepo, Asociación de Estudiantes de Sociología AES, Polo Ciudadano, Juventud Revolucionaria JR-16, Movimiento Alternativa Socialista (MAS).

 Dirigentes para invitar:

Eduardo Gil (Convergencia Sindical)

Saúl Méndez (SUNTRACS)

Fernando Ábrego (ASOPROF)

Alejandro John (FUCLAT)

Ileana Corea   (JR-16)

Nelva Reyes  (CGTP)                                  

Kevin Sánchez (Base de Chepo)

Juan R. Herrera (AEVE)

Maribel Gordón (Alianza por la Vida)

Diógenes Sánchez (ASOPROF)